Los jóvenes tienen toda la libertad de conocerse pero son sus progenitores quienes deciden sus relaciones conyugales, con el deseo de tener yernos vigorosos y ágiles en la caza, la captura de peces, la construcción, la artesanía y especialmente en el culto. Y nueras decentes, laboriosas y hábiles en la tejedura, el bordado y el cultivo.

Normalmente, las parejas se conocen al ejercer juntos actividades productivas, en las fiestas, los mercados o encuentros entre amigos.

Una boda de los Lo Lo (Foto: Internet)

Si un par de jóvenes se enamoran, expresan sus sentimientos en las sesiones de canto de intercambio. Tras varios encuentros así, hablan de sus relaciones amorosas con sus padres, quienes proponen establecer los contactos y proceder al asunto en conjunto. Las formalidades del casamiento comienzan a realizarse solo cuando los progenitores de ambos lados aceptan la propuesta de sus hijos de unirse.

Los sacerdotes desempeñan un papel muy importante en las bodas de los Lo Lo. Si la familia del novio invita a uno a efectuar la celebración, ese hombre se encargará de escoger la fecha, que será bendecida por las deidades, para desplegar los procedimientos nupciales.

Lo Di Pao, residente de la comuna de Lung Cu, del distrito de Dong Van, en la provincia de Ha Giang, dio a conocer: “No todas las familias invitan a los brujos a las bodas, pero siempre les consultan sus opiniones para estar seguros de su decisión. Estos sacerdotes les ayudan a escoger una fecha adecuada y coordinar los preparativos para la boda, que hoy en día es más sencilla que antes”.

Una vez que se pongan de acuerdo sobre la fecha para celebrar el casamiento, se lleva a cabo la pedida de mano. Si la familia de la novia acepta la propuesta de la otra, tiene el derecho de pedir los presentes para la boda, los cuales suelen ser arroz, carne de cerdo y aguardiente, y además, pueden exigir prendas de vestir y joyas para la chica. No darán estas ofrendas a los padres de ella, sino a su hermano, ya que este hombre tiene una posición respetada por la comunidad Lo Lo. Es quien distribuye las herencias de la familia y tiene el derecho de decidir los procedimientos de la boda. Lo Di Pao agregó: “En la actualidad piden regalos de boda sencillos. Con un par de gallos, dos litros de aguardiente y un paquete de arroz glutinoso ya pueden ir a la pedida de mano. Pero anteriormente, si el hermano de la novia mandaba matar una vaca para la boda, la familia del pretendiente debía de hacerlo y a ese hombre se le destinaba uno de los muslos, la parte más deliciosa del animal”.

Un rasgo especial de la etnia Lo Lo es que tras la ceremonia de pedida de mano, los enamorados deben esperar tres años para poder celebrar la boda y vivir juntos bajo un mismo techo. Durante ese tiempo, la novia y su familia tienen que preparar las dotes y pertenencias de la chica a fin de llevarlos a la casa de su futuro marido. Mientras, este último debe obsequiar a sus suegros con arroz, pescados y otros alimentos en ocasiones festivas como el año nuevo. Cuando llega la fecha indicada para las ceremonias nupciales, la familia del joven lleva a la otra arroz, licores, carne de cerdo, tabaco y una suma de dinero. Estas ofrendas serán recibidas por un representante de la familia de la novia e inmediatamente serán destinados a la cocina para contribuir a su banquete.

La pareja, al entrar en la casa del novio rinde tributo a los antepasados de éste y luego se unirá a la celebración junto a sus parientes y amigos. En el ambiente alegre de la boda acentuado por las animadas melodías y bailes, todo el mundo ofrece cálidas felicitaciones a los jóvenes recién casados con el deseo de que lleven una vida conyugal duradera y feliz.