(VOVworld) – Después de terminar su expediente sobre el rito del juego de la soga, Vietnam lo envió a la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), en espera de su reconocimiento como patrimonio cultural inmaterial representativo de la Humanidad en el 2015. El hecho de que Vietnam, Corea del Sur y Filipinas elaboraran el expediente multinacional sobre el rito de la soga no sólo contribuye a enaltecer este rasgo cultural, sino también a aumentar el intercambio cultural entre los tres países.

Por primera vez, Vietnam colabora con otros países para completar un expediente patrimonial. El juego de la soga es uno de los entretenimientos populares vietnamita desde tiempos remotos y en las fiestas de primavera, muchas personas participan en él abrigando el deseo de una abundante cosecha más una vida próspera y feliz. En estas solemnidades, la competición de la soga refleja la fuerza de la unidad de los agricultores. El profesor Ngo Duc Thinh, miembro del Consejo Nacional de Patrimonios Culturales informó: “No se trata simplemente de un juego, sino una competición de índole espiritual. Los ganadores tienen el privilegio de entrar en la Casa Comunal y templos para rendir tributos a los santos y fundadores de la aldea. Creen que además de los premios que se les otorgan, ellos en particular y su poblado en general serán protegidos por los genios y antecesores. Por eso, además de satisfacer la demanda de recreación del pueblo, el juego de la soga también lleva un explícito significado espiritual.”

La fiesta primaveral de la aldea de Huu Chap, de la comuna de Hoa Long, de la ciudad de Bac Ninh comparte rasgos comunes con otras festividades tradicionales de Vietnam. Sin embargo, lo especial radica en que el juego de la soga se convierte en una ceremonia principal. Según cuentan los ancianos de la aldea, en el pasado, se movilizaban los hombres más fuertes para arrastrar grandes troncos de madera que servían para la construcción de la Casa Comunal y viviendas. En las celebraciones, el pueblo local evocaba esta actividad laboral, que luego fue simbolizada con el juego de la soga. La competición del villorrio de Huu Chap se efectúa cada 4 de enero del calendario lunar y hasta ahora tiene aproximadamente 400 años de existencia. Los ritos de esta festividad se llevan a cabo con toda solemnidad, además de un desfile de palanquín, para recordar la historia de la construcción de la aldea. Sin embargo, según el señor Nguyen Van Chuan, jefe de la Asociación local de personas de avanzada edad, el juego de la soga siempre es la actividad más atractiva de la fiesta.“Frecuentemente como indica el nombre del juego, los participantes de los dos lados tiran de una soga. Pero en nuestra aldea, partiendo de la leyenda sobre los traslados de madera para la construcción, la soga es sustituida por dos troncos de bambú unidos por cuerdas y sujetados en cada lado por una palanca. La competición exalta la fuerza y la resistencia de los jóvenes de la aldea. A veces para preparar esta fiesta, dedicamos meses a buscar y seleccionar los mejores troncos de bambú. Es un gran honor para la familia que tiene los bambúes seleccionados. Los muchachos que son elegidos para participar en este juego también son el orgullo de su familia.”

Los 70 jóvenes más fuertes de la aldea son divididos en dos partes, la del Este y la del Oeste. Estos dos grupos deben tirar la vara doble de bambú en tres topes, y el que vence dos tiempos será el ganador final de la justa. Sin embargo, al fin y al cabo, el equipo del Este siempre gana, porque según la tradición, dicho resultado traerá abundantes cosechas a la aldea. Por lo tanto, en la última tanda, los visitantes tratan de echar la mano para ayudar al grupo del Este y la festividad concluye en un ambiente alegre y satisfactorio para todos.

Además de la etnia mayoritaria Kinh, a grupos étnicos minoritarios como Thai, Tay, Nung y Giay, entre otros, también les gusta el juego de la soga. Cada comunidad lo practica de un modo diferente, y con materiales diversos, pero lo que desean mostrar a través de esta recreación, es el espíritu de unidad y solidaridad. El compositor Thao Giang, un investigador de la cultura y artes populares valoró: “El juego de la soga existe en otros países también, pero en Vietnam, desde tiempos remotos hasta ahora, resaltan siempre la alegría y la fuerza colectiva, sin importar quien resulta ganador.”

En la sociedad moderna de hoy, éste sigue siendo un juego popular, especialmente en los círculos estudiantil y laboral. La presentación de esta recreación a la UNESCO para que sea reconocida como patrimonio cultural inmaterial representativo de la Humanidad constituirá una oportunidad para que Vietnam popularice más y aumente la afición a este simpático juego.