El presidente Ho Chi Minh representa el patriotismo y la dignidad del pueblo vietnamita

El ideario, la moralidad y el estilo de vida del prócer de la independencia de Vietnam se reflejan en su proceso de las luchas revolucionarias. Al asumir durante largo tiempo el máximo cargo en el Partido y el Estado, el presidente Ho Chi Minh ejerció el poder encargado por la organización política y su pueblo con un espíritu democrático extraordinario, ética ejemplar, honestidad, imparcialidad y entereza.

Valores ampliamente propagados en la sociedad

Los valores y las influencias del llamado cariñosamente por su pueblo “Tío Ho” se fundan en muchos factores, entre ellos el estilo de trabajo. Se trata de uno muy propio de los grandes líderes políticos y los verdaderos científicos. En los últimos años, el movimiento de estudiar y seguir sus enseñanzas se han extendido ampliamente en Vietnam hasta convertirse en un hábito y una labor diaria asociada con las tareas asignadas a cada profesión y estrato social. Esta movilización se implementa mediante actividades prácticas. Por ejemplo, la rama de la salud se imbuye de su instrucción “Médicos son como madres”, y el sector educativo sigue desplegando programas como “Buena enseñanza, buen estudio” y “Cada maestro, cada maestra es un ejemplo de la moralidad, autodidactismo y creatividad”, entre muchos otros.

Siguiendo su ejemplo de laboriosidad, ahorro, honestidad, imparcialidad e integridad, los diversos grupos sociales, sobre todo los jóvenes, se empeñan en hacer mayores innovaciones en la producción para aumentar la eficiencia económica. Tran Ngoc Diep, estudiante de la escuela preuniversitaria Hoai Duc A, en Hanói, la capital, expresó: “Me prometí a mí misma a esforzarme al máximo para ser buena hija y buena alumna. Y me recuerdo no faltar nunca a esta promesa a través de las prácticas diarias”.

Nguyen Hoang Thao My, master y profesora de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Nguyen Tat Thanh, en Ciudad Ho Chi Minh, compartió: “Entre las normas para el estudio y seguimiento de la ideología, ejemplo moral y estilo de vida del presidente Ho Chi Minh, me siento muy identificado con su opinión de que “del dicho al hecho no hay trecho” y me fuerzo a aprenderlo de la mejor manera posible desde hace años. En especial, en la actual era industrial 4.0 es muy necesario concebir iniciativas, pero también materializarlas. Eso seguramente impulsará el desarrollo de nuestro país”.

Figura admirada por el mundo

En el ámbito internacional, el presidente Ho Chi Minh es sinónimo del patriotismo y la dignidad del pueblo vietnamita. En la ciudad de Montreuil, en Francia, mantienen fresco el recuerdo de este a quien consideran un amigo entrañable del pueblo trabajador francés y un camarada resuelto y fiel a los comunistas de ese país. Florian Vigneron, vicealcalde para los asuntos socioeconómicos de esa localidad destacó: “La paz, la libertad y el derecho a la autodeterminación del pueblo vietnamita son los objetivos que el presidente Ho Chi Minh persiguió durante toda su vida, desde que pasó su juventud descubriendo Francia hasta después de convertirse en el prócer de la independencia de Vietnam”.

Ho Chi Minh es sin dudas la encarnación de la ética revolucionaria. Es ampliamente conocido por su sencillez y modestia. El presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, en ocasión de su visita a Vietnam en 2013 escribió: “La Humanidad entró en el siglo XXI, un siglo de paz, progreso y prosperidad. Sin embargo, los valores ideológicos y morales de Ho Chi Minh siguen siendo antorcha y símbolo de una cultura futura”.

Vietnam ha experimentado muchos cambios, pero los valores del pensamiento, la moralidad y el estilo de vida de ese ilustre líder permanecen y permanecerán grabados en cada vietnamita y en los amigos del mundo.