(VOVWORLD) - Estados Unidos y Corea del Norte pusieron punto final al estado hostil y comenzaron una nueva era de paz, estimó este martes el presidente surcoreano, Moon Jae-in, al referirse al último encuentro entre el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, y el líder de la República Popular Democrática de Corea, Kim Jong-un, en la Zona Desmilitarizada (DMZ) en la aldea fronteriza de Panmunjom.
 El presidente surcoreano, Moon Jae-in, el líder de la República Popular Democrática de Corea, Kim Jong-un, y el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, en la Zona Desmilitarizada (Foto: Xinhua/VNA) |
En una reunión del gabinete, Moon Jae-in comentó que aún sin firmar ningún documento, la actuación de ambos líderes en realidad transmitió un mensaje sobre el fin de las hostilidades y el inicio de una nueva era de paz.
El mandatario también enfatizó que el encuentro se efectuó tras una propuesta inesperada de Trump a través de su cuenta de Twitter y una respuesta audaz de Kim. “Fue producto de una imaginación extraordinaria que sobrepasó todos los protocolos corrientes”, remarcó.
De acuerdo con Moon Jae-in, la desnuclearización y el restablecimiento de la paz en la península coreana requieren mucha imaginación para resolver problemas históricos espinosos.