(VOVWORLD) - Vietnam dispone de numerosas aldeas artesanales muy antiguas, cuyos productos son muy apreciados dentro y fuera del país. Hasta ahora, muchas de estas mercancías han contribuido a promover la imagen nacional al mundo y al proceso de integración internacional del país.
 Productos de seda de la aldea artesanal de Van Phuc. (Foto: Ngoc Anh/VOV5)
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Vietnam cuenta con unas 5 mil 400 aldeas artesanales, que ofrecen una gran gama de productos, como cerámica, platería, brocados y tejidos, etc. Varios de ellos fueron reconocidos como marca nacional a saber la seda de Van Phuc, la cerámica de Bat Trang y la platería de Dong Xam, entre otros. Sin embargo, según Dam Tien Thang, subdirector del Servicio de Industria y Comercio de Hanói, las potencialidades de los poblados artesanales aún no se explotan de manera eficiente. “El potencial de exportación de los productos artesanales vietnamitas es de 200 millones de dólares. Pero ahora, solo alcanzamos los 160 millones de dólares”, sostuvo Tien Thang.
Eso se debe a que falta un mecanismo de promoción comercial para los productos tradicionales. Además, aún no se presta una atención adecuada al registro y la protección de una marca. Por esta razón, las mercancías nacionales de este tipo tienen poca visibilidad internacional, especialmente en los mercados exigentes como Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Alemania.
Ante tal situación, el “Artesano Destacado” Nguyen Van Quyen, presidente de la Junta Directiva y director de la Corporativa Artesanal de Hoa Mai, en la provincia de Lao Cai, reiteró la importancia de la cooperación. “Las aldeas artesanales deben cooperar conjuntamente y con la Unión Nacional de Cooperativas para crecer y buscar salida a sus productos. También son importantes la conexión y el intercambio entre los oficios. Además, se pueden organizar ferias para presentar nuestros productos a los amigos internacionales.”
 Productos cerámicos de Bat Trang. (Foto: Ngoc Anh/VOV5)
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De hecho, el Gobierno ha tomado varias medidas dirigidas a ayudar a estos poblados a desarrollarse e integrarse internacionalmente. Concretamente, emitió un decreto para apoyar los oficios tradicionales en el riesgo de desaparición, así como los de las minorías étnicas y los con buen ingreso. Asimismo, facilita el desarrollo del turismo comunitario en las aldeas artesanales y lanzó un programa titulado “Una localidad, un producto”.
Por su parte, la Asociación de Aldeas Artesanales alienta la formación de empresas en esos poblados para promover sus productos al mercado internacional. Luu Duy Dan, presidente de la entidad, dijo: “Los artesanos y sus productos son el tesoro más preciado de estas aldeas. Estamos en el proceso de establecer la lista de las 100 mejores aldeas artesanales, los 100 mejores artesanos y los 100 mejores productos. Por el momento, tenemos ya en el listado el nombre de 64 aldeas.”
Al lado de las ayudas del Gobierno y las asistencias de empresas, cada aldea debe invertir en la construcción de una marca, con el fin de elevar la competitividad de sus bienes y obtener el desarrollo sostenible. De esta manera, conquistará muchos mercados en el mundo.