(VOVWORLD) - El primer ministro indio, Narendra Modi, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas de la explosión ocurrida la noche del 10 de noviembre cerca del Fuerte Rojo en Nueva Delhi, que dejó 15 muertos y 30 heridos.
Fuerzas indias trabajan en el lugar de una explosión cerca del Fuerte Rojo, en el casco antiguo de Delhi, India, el 11 de noviembre de 2025. (Foto: REUTERS/Adnan Abidi) |
En un mensaje en la plataforma X, Modi calificó el hecho de “gran tragedia” y aseguró que el gobierno brindará apoyos a los afectados.
Tras el incidente, varios estados entre ellos Bihar, Chandigarh, Kerala, Uttar Pradesh, Haryana y la capital, fueron puestos en alerta máxima.
Se reforzó la seguridad en cinco estaciones de ferrocarriles en Delhi, mientras que la Fuerza de Seguridad Fronteriza (BSF) intensificó la vigilancia en las fronteras con Pakistán y Nepal.
El ministro indio del Interior, Amit Shah, informó que se investiga el caso desde todas las hipótesis, incluida la posible implicación terrorista.
Las autoridades locales sospecharon del grupo Lashkar-e-Taiba (LeT), luego de que su comandante en Pakistán, Saifullah Saif, apareciera en un video afirmando que el líder Hafiz Saeed planeaba ataques contra la India desde Bangladés.
Las sospechas aumentaron tras la reciente incautación de casi tres toneladas de explosivos en una operación antiterrorista.