(VOVworld) – En las elecciones presidenciales de EEUU en 2012, los votantes apostaron por una sola cosa: el futuro del país. Los estadounidenses pusieron mucha esperanza en la mejora de la economía nacional, la reducción del desempleo, el aumento del ingreso con el mantenimiento de los intereses sociales para garantizar un mejor futuro. Otra vez Barack Obama ganó la confianza de los electores, en lo que se había comprometido: el cambio. La reelección de Obama ante el republicano Mitt Romney con una ventaja de 100 votos electorales refleja las expectativas del pueblo norteamericano en su nuevo mandato.

Pese a la inconformidad en ciertos sectores y ámbitos, los estadounidenses abrigaban una esperanza, plasmada en sus votos a favor del candidato predilecto a la presidencia: Barack Obama.

Barack Obama fue reelegido como presidente de EEUU
para el período 2013-2017

Los estadounidenses son caracterizados por el pragmatismo, por lo tanto, el factor económico nunca deja de ser un factor decisivo en las campañas electorales en ese país. En la carrera electoral del año pasado, aunque al principio Obama no sobrepasó mucho a su rival Mitt Romney, quien a veces ganó predominio, el primer presidente negro en la historia de EEUU resultó ganador. Esto parece comprensible porque los votantes estadounidenses no podían apostar sobre su destino con razones ambiguas.

Ante todo, pese a no adelantar mucho, las medidas adoptadas por Obama en 2012 han sido consideradas como una ligera palanca para la economía norteamericana en lenta recuperación. Este mandatario muestra su apoyo a la clase media, presta atención a las políticas sanitarias, los asuntos de la mujer y la igualdad de género, así como las preferencias en la educación… En el último año, Barack Obama hizo grandes esfuerzos para impulsar el desarrollo económico. Su mayor éxito radicó en salvar la industria automovilística del Estado de Ohio, donde una octava parte de los empleos se relacionan con esta rama. Adoptó además medidas para incitar al Congreso a modificar la ley de Impuestos. A tono con este proyecto, las corporaciones y personas adineradas en la sociedad deberán pagar mayor tributo para que el Gobierno pueda aumentar inversiones y garantizar la igualdad social. Según datos del Departamento de Trabajo de EEUU, el desempleo en el país se redujo a un 7,7% en noviembre de 2012 y esta es la tasa más baja en los últimos 4 años e inferior al nivel del mes de octubre con un 0,2%. Este es considerado un logro significativo de EEUU en el actual contexto.

El desempleo en EEUU se redujo a un 7,7% en noviembre de 2012
y esta es la tasa más baja en los últimos 4 años

Hace 4 años, al entrar en la Casa Blanca, Barack Obama prometió unificar un país en división mediante una sola palabra: cambio. Cuatro años han transcurrido y en realidad, el cambio sí se ha producido en este territorio. En la política exterior, Obama logró impedir el aumento militar en frentes prescindibles. Su decisión de retirar las tropas de Afganistán e Iraq le permitió a ganar la mayor popularidad, y poner fin al agotamiento de los efectivos estadounidenses en esos frentes de batalla. EEUU mantenía una actitud moderada con los países de contrapeso como China y Rusia. Aunque siguió mostrando la firmeza en la arena internacional para reafirmar la posición primera de la nación, Obama tomó criterios de cooperación en beneficio de las partes. Las relaciones entre Washington y el mundo islámico también registraron transformaciones con tendencia a la positividad. Otro cambio importante en la política externa de EEUU en 2012 consistió en su proyecto de trasladar el centro a Asia-Pacífico, aumentando las relaciones con India, estrechando la alianza con Corea del Sur y Japón y realizando continuas maniobras militares con países del Este de Asia. El hecho de que Obama escogió el Sudeste Asiático para efectuar su primera gira al extranjero después de la reelección es otra muestra de su determinación de aumentar la influencia de EEUU en esta región.

El Gobierno de Barack Obama planea retirar sus fuerzas militares 
de Afganistán después de 2014

Obviamente, los estadounidenses necesitan de la reelección de Barack Obama. Desean que el presidente materialice los compromisos que hizo a los votantes. El presidente reelecto consideró como la tarea central el desarrollo económico, e instó a los congresistas republicanos en la Cámara Baja a superar las discrepancias para concentrarse en resolver los problemas apremiantes del país. Se comprometió a crear millones de empleos nuevos, duplicar las exportaciones, desarrollar las energías ecológicas para reducir la mitad de las importaciones de energía en 2020, disminuir el déficit presupuestario, aumentar impuestos a la clase pudiente, reducir tributos de la clase media y de las familias de bajos ingresos y reformar el Código de Tarifas empresariales para bajar las contribuciones de las empresas que aportan empleos a los trabajadores norteamericanos…

En 2013, los electores estadounidenses confían en que su presidente conduzca el barco patrio a los éxitos, para continuar confirmándose como la primera potencia mundial.