(VOVworld) – El Mar Oriental es una región con recursos naturales abundantes y estratégica posición geopolítica en el mundo y por eso se ha convertido en vórtice de reivindicaciones territoriales sin dilucidarse hasta la fecha. Gracias a la consensuada Declaración sobre el Comportamiento de las Partes concernientes en el Mar Oriental, los países involucrados cuentan ya con una base jurídica para pactar un Código de Conducta complementario y así mantener la paz y la amistad en la región.

La Declaración sobre el Comportamiento de las Partes concernientes en el Mar Oriental (DOC) fue alcanzado el 4 de noviembre de 2002 en Pnom-Penh, Camboya y se considera el primer documento político firmado entre la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y China para solucionar los litigios territoriales en la región.

Proceso del cumplimiento de la Declaración de Comportamiento

En el itinerario para firmar esta sustancial Declaración, ASEAN y China aprobaron el 27 de julio de 2011 en Bali, Indonesia las instrucciones para su cumplimiento después de 9 años de negociación, lo que significó un progreso en la gestión de las disputas en la zona marítima. Estos resultados fueron destacados en el mensaje del secretario general de la ASEAN, Le Luong Minh transmitido por el vicesecretario general Nyan Lynn al quinto simposio internacional sobre el Mar Oriental recién concluido en Hanoi: “La Declaración sobre el Comportamiento de las Partes concernientes en el Mar Oriental define los fundamentos jurídicos para mantener la paz, la estabilidad y la seguridad en la región y al mismo tiempo las normas del comportamiento de las partes concernientes exhortándolas a solucionar las diferencias por vías pacíficas y mantener la estabilidad. Además, el documento sentó bases para el diálogo y los mecanismos de cooperación regional y así facilitar el despliegue de los proyectos de colaboración”.

Durante más de una década, dicha Declaración se ha convertido en un cimiento para las actividades de los países de la ASEAN y China en cuanto a las reivindicaciones territoriales en la región. Sin embargo, no consiste en el objetivo final para solucionar las polémicas. El mensaje del secretario general de la ASEAN, continúa diciendo: “El Código de Conducta debe definir los fundamentos prácticos, sobre la base de las negociaciones sostenidas por las partes involucradas. En lo adelante, debe convertirse en una herramienta jurídica integral y vinculante con los países de la ASEAN y China para construir un entorno pacífico y estable para resolver las reivindicaciones territoriales en la región marítima”.

Para dar a luz a un Código de Conducta (COC) se requiere un consenso entre las partes concernientes sobre diferentes temas, lo que resulta difícil en medio de las diferencias existentes entre el bloque del sudeste asiático y China en la materia.

Perspectivas comunes hasta el Código de Conducta

En un cambiante contexto regional y mundial, la cuestión del Mar Oriental centra la atención tanto de China como de la ASEAN en 2013. Se trata de un año en que ambas partes han tomado acciones más positivas para acelerar el nacimiento del Código de Conducta, lo que se demostró en una declaración conjunta en la décimo sexta conferencia ASEAN – China, en ocasión de los 10 años del cumplimiento de la Declaración de Comportamiento y el diálogo entre ambas partes en septiembre de 2013 en un esfuerzo de los estados del bloque para solucionar los problemas relacionados con el Mar Oriental en los encuentros con dirigentes chinos de alto nivel. Ralf Emmers, experto de investigación sobre el Mar Oriental de la Escuela de Estudios Internacionales S Rajaratnam, Singapur opinó: “A principios de 2013, China decidió participar en las negociaciones sobre la elaboración de un Código de Conducta. Este es un viraje positivo de Beijing frente a sus criterios inflexibles sobre el tema parapetándose en que no era la hora de hacerlo. Considero la participación de China en los diálogos en torno al nacimiento del documento como un progreso relevante. La aprobación del Código de Conducta es un proceso duradero y no se puede alcanzarlo a corto plazo”.

Mantenimiento de paz y estabilidad en la región

Aunque el tema del Mar Oriental forma parte de los ámbitos de cooperación entre la ASEAN y China, y por eso si no se puede lograr un consenso, perjudicará la situación regional de por si calificada de “delicada” durante los últimos años. Li Jianwei, directora del Centro de Investigación de economía marítima, adscrito al Instituto Nacional para los Estudios sobre el Mar Oriental, China estimó: “La paz y la estabilidad y el cumplimiento de la ley internacional juegan un papel trascendental para todos los países, entre ellos los miembros de la ASEAN y China. Debemos poner en práctica las medidas tomadas para facilitar el cumplimiento de la Declaración sobre el Comportamiento de las Partes concernientes en el Mar Oriental y en lo adelante del Código de Conducta sobre el tema”.

La participación de China y la ASEAN en las negociaciones sobre la cuestión del Mar Oriental contribuirán a consolidar el papel central del bloque del sudeste asiático en cuanto a la seguridad regional. Ambas partes realizan el programa de cooperación sobre la base de la Declaración de Comportamiento de las partes para elevar la confianza recíproca y de ahí, crear un ambiente favorable en bien de los diálogos en pro de un Código de Conducta. Estas señales alentadoras alimentan la esperanza de una cooperación más eficaz entre los países implicados en aras de garantizar la paz y la estabilidad en la región.