Un importante punto de inflexión para las disputas en el Mar del Este en 2017

(VOVWORLD) - El año 2017 marca un paso importante en la solución de la cuestión del Mar del Este ya que los 10 países miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) y China ratificaron oficialmente el marco del Código de Conducta de las Partes Concernientes en el Mar Oriental (COC). A pesar de los muchos desafíos que aún quedan por delante, esto es considerado como el progreso más significativo conseguido por ambas partes después de muchos años de negociaciones, con el fin de controlar las tensiones que surjan en relación con las disputas soberanas en las referidas aguas.
 Un importante punto de inflexión para las disputas en el Mar del Este en 2017 - ảnh 1 La 50 Reunión de Ministros de Asuntos Exteriores de la Asean en Manila, Filipinas (Foto: VNA)
En Manila, Filipinas, los ministros de Relaciones Exteriores de los 10 Estados integrantes de la Asean y el representante de China firmaron oficialmente el pasado 6 de agosto el marco del COC, activando así el proceso de los diálogos para crear una herramienta jurídica y vinculante destinada a resolver los diferendos en estas aguas, contribuyendo al mantenimiento de la paz y la estabilidad en la región.

El referido borrador es visto como un “esbozo” que define la naturaleza del Código, detallando la base legal y el comportamiento de las partes referentes.

Confianza fortalecida

La elaboracion del documento ya fue sugerida en la década de 1990, pero no había ha sido sometido a debate entre la Asean y China hasta 2002, en el contexto de las crecientes tensiones a raíz de las disputas territoriales en el Mar del Este. Durante muchos años, el proceso de negociaciones se ha retrasado constantemente, a pesar de los esfuerzos de los países miembros del grupo comunitario. Su causa principal se debe a las diferencias entre las partes dialogantes.

En 2013, Beijing acordó comenzar el proceso formal de las consultas sobre este tema y después de casi cuatro años de negociaciones, el gigante asiático y la Asean acaban de completar el marco del COC para mediados de 2017.

Aunque se necesitará un largo camino para convertirlo en un documento completo y práctico, la consecución de este borrador se puede ver como un progreso significativo, lo que demuestra la voluntad de construir la confianza mutua. Al respecto, Le Dinh Tinh, vicedirector del Instituto de Estudios del Mar del Este, adscrito a la Academia Diplomática de Vietnam, estimó: “Sobre su naturaleza, el COC no es un mecanismo para resolver completamente las controversias bilaterales, pero contribuye al fortalecimiento de la confianza y la promoción de los diálogos, además de proporcionar un instrumento regulador para que las partes involucradas aborden los desacuerdos satisfactoriamente. Podemos tomar ejemplo sobre los principios que regulan el uso de medios pacíficos y de diálogos, así como el no uso de la fuerza y la amenaza de hacerlo, o los de la libertad y seguridad marítima. De hecho, este mecanismo no juega un papel directo en la solución de las disputas salvo que permitirían a las partes involucradas en los reclamos territoriales alcanzar un acuerdo sobre el tema”.

Se puede afirmar que un año después de que la Corte Permanente de Arbitraje dictaminara sobre la demanda filipina relativa al Mar Oriental, las disputas en estas aguas superaron la atención de los Estados demandantes para convertirse en una preocupación generalizada de los países de fuera de la región.

La cuestión del Mar del Este ahora es un tema importante en la agenda de los foros multilaterales y mecanismos de cooperación como el G7 y el APEC. Y, por supuesto, el logro del marco del COC recibió el respaldo de la opinión internacional. El embajador británico en Vietnam, Giles Lever, comentó: “Con el tiempo, hemos sido testigos de un gran esfuerzo en la construcción de un texto vinculante destinado a solventar las controversias. Aunque hay muchos problemas que siguen sin respuesta, hemos visto el potencial y la confianza para convertir este Código en una herramienta eficaz, con la que nos permitirá gestionar las actividades en el Mar del Este y garantizar un entorno pacífico en esta zona”.

Necesitan más esfuerzos para evitar los conflictos

La adopción del borrador del COC es un signo positivo en las relaciones entre la Asean y China. También representa el consenso de los 10 países miembros del bloque regional sobre un tema complejo y sensible que se ha estancado a lo largo de los años. Sin embargo, todo esto es solo el comienzo. El primer desafío en las próximas conversaciones del COC es encontrar una visión unificada entre las partes, además de dar validez legal al documento. Para ello, se requiere un mayor esfuerzo y una buena voluntad de todas las partes. Le Dinh Tinh señaló lo siguiente: “Al abordar el problema del Mar Oriental, todavía nos faltan los acuerdos y compromisos de los países involucrados en la aplicación de los principios del Derecho Internacional para garantizar el orden, la paz y la seguridad en la región. Por lo tanto, queremos promover lo antes posible las negociaciones relativas y que sus contenidos sean adecuados y tengan valores jurídicos para prevenir los conflictos y resolver las disputas territoriales”.

De hecho, la legalidad del COC será indudablemente un tema clave en las negociaciones entre ambas partes en los próximos años. Sin embargo, el hecho de que la Asean y China acordasen relanzar los diálogos para encaminarse a un código de comportamiento apropiado en el Mar del Este tiene implicación significativa en el fomento de la amistad, la consolidación de la confianza, la cooperación y el desarrollo mutuo de todos.

comentar

Otros