(VOVworld) - El presidente estadounidense, Barack Obama, ha expresado su optimismo de que la organización extremista del autodeclarado Estado Islámico (EI) será echada de Iraq, pero este esfuerzo tomará tiempo y requerirá el establecimiento de un gobierno multi-sectario en Bagdad, dice Obama.

Al reunirse con el primer ministro iraquí, Haider al Abadi, al margen de la cumbre de jefes de Estado y de gobierno del G7 en Alemania, Barack Obama confirma que Estados Unidos continuará enviando sus militares para entrenar a las tropas iraquíes para que puedan combatir al enemigo, en vez de sólo mantener operaciones defensivas.

El presidente estadounidense, Barack Obama y el premier iraquí, Haider al Abadi, reunidos al margen de la Cumbre del G7 en Alemania (Foto:VNA)

Por su parte, el primer ministro Al-Abadi instó a la comunidad internacional a prevenir el contrabando de petróleo del grupo Estado Islámico. A pesar de la reciente caída en las manos del Estado Islámico de Ramadi, capital de la provincia Al Anbar, a 100 kilómetros al oeste de Bagdad, Haider al Abadi, afirmó que la conquista de Ramadi por parte de los yihadistas es sólo temporal, subrayando los progresos por las fuerzas iraquíes en otros frentes.

El encuentro entre Obama y al Abadi tuvo lugar sólo un día después de que el ejército iraquí afirmó haber reconquistado la provincia Baiji, un importante centro refinador, a 250 kilómetros al norte de Bagdad. Este avance ayudará a las fuerzas iraquíes a garantizar la seguridad de la mayor refinería de petróleo, que sirve la demanda interna.