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Concretamente, hasta 2020, el territorio indochino se esfuerza para aumentar la calidad y el valor añadido de las mercancías nacionales que tienen ventajas comparativas en el extranjero y el crecimiento promedio anual de este indicador para los productos agrícolas y acuíferos a un 20%. Entretanto, Vietnam trazó la meta de incrementar el ritmo de exportación de estos rubros a un 8% en el período 2016-2020. Para ello, se concentran en la reorganización productiva renovando el método de creación de los bienes y su venta en el exterior y la transformación de los productos de exportación hacia un valor añadido más alto. Por otra parte, se deben aumentar la competitividad nacional, apoyar a las empresas en el recorte de los gastos y mejorar la capacidad de las compañías de manufactura y exportación, especialmente las pequeñas y medianas. Asimismo hay que reforzar la calidad de las asociaciones sectoriales y aplicar avances científico-tecnológicos cumpliendo con los requisitos de la cuarta revolución industrial en cuanto a la producción y la gestión.