La rueda negociadora informal concluyó el 12 de enero después de cinco días de duración y se prevé que el Partido Socialdemócrata (SPD) celebrará el próximo día 21 un congreso extraordinario para poder empezar las conversaciones formales con el bloque conservador. Si decide en tal ocasión reeditar la gran coalición, llevaría la voz en un referéndum que planea desarrollarse a mediados del febrero venidero. Si las posteriores conversaciones bilaterales resultan exitosas, un nuevo Ejecutivo podría fundarse el primero de abril. Al contrario, Alemania enfrentaría en unos nuevos comicios o la canciller Angela Merkel lideraría un Gobierno minoritario.

Señales positivas

Según los resultados de las recién concluidas negociaciones, las dos partes buscaron superar sus diferencias en la política fiscal. En idéntico sentido, acordaron reducir la tarifa impositiva para los ricos, eliminar la meta de disminuir hasta 2020 el 40% de las emisiones de dióxido de carbono en comparación con la cantidad del 1990, así como algunos asuntos relativos a la Unión Europea (UE) y la economía. Lograron un acuerdo en cuanto a los principios básicos antes de iniciar las próximas conversaciones. El documento incluye un compromiso para cooperar estrechamente con Francia a fin de renovar y consolidar la Eurozona ante las amenazas globales. Observadores opinaron que el consenso bilateral demostró la concesión por parte del SPD a uno de los compromisos de la candidatura de Angela Merkel. Sin embargo, ambos deben vencer otros diferendos vinculados a la migración, acotaron.

Luego de que los referidos partidos alcanzaran el preacuerdo decisivo, Alemania y Francia acordaron impulsar los esfuerzos por la modernización de la UE en la reunión de sus ministros de Finanzas, esta semana en París. Analistas subrayaron que ese encuentro mostró los preparativos de Berlín para celebrar a la vez negociaciones con el país vecino y entre sus partidos sobre la creación de una gran coalición, previstas a efectuarse a finales del presente mes. Según dirigentes del SPD, los últimos diálogos con el CDU/CSU abrirán camino hacia los planes de renovación de Europa para ayudarla a salir de las medidas de austeridad y lograr nuevas oportunidades de inversiones y empleos.

Alemania hacia un Gobierno estable dentro del bloque europeo

El SPD se considera como el eje político potencial de Europa. Su presidente, Martin Schulz, tiene enormes influencias en asuntos europeos. Fue aliado del partido de Angela Merkel durante 8 años. No obstante, desde la votación en septiembre pasado, sus líderes se comprometieron a convertirlo en la oposición alemana, lo cual impediría impulsar el futuro del Viejo Continente y dificultaría los esfuerzos de sus reformas.

Un Gobierno estable de Alemania reviste un significado importante para toda Europa, puesto que los países miembros de la UE consideran a Berlín como un factor decisivo para la estabilidad de la comunidad. Así que las recién concluidas conversaciones entre el SPD y el bloque CDU/CSU lograron señales positivas con miras a fundar una gran coalición capaz de crear perspectivas en la economía alemana. Esto contribuyó a reducir la presión sobre Angela Merkel y suavizar así las preocupaciones sobre las influencias de Berlín en los temas internacionales cuando aún no tiene la nueva gobernanza.