Soldados del Puesto de la Guardia Fronteriza de Thu Lum llevan a sus hijos adoptivos a la escuela. (Foto: VOV)

La imagen de un soldado acompañando a tres chicos integrantes de minorías étnicas en su camino matutino a la escuela es un hábito familiar para los que viven cerca del Puesto de la Guardia Fronteriza de Thu Lum, en el distrito de Muong Te de la provincia de Lai Chau. En este lugar surgió la iniciativa de adoptar niños originarios de pueblos emplazados entre las unidades del Mando de Guardafronteras de Vietnam.

Los estudiantes que hemos mencionado son Chang Mo Hu y Ma Duc Manh, pertenecientes al grupo étnico de Ha Nhi, y Vang Lo Hu, integrante de la etnia de La Hu. Huérfanos, o nacidos en familias numerosas con pocos recursos, han sido criados desde hace varios años por los soldados del Puesto Fronterizo de Thu Lum.

Gracias a esta asistencia, pueden atender con regularidad a las clases y vivir una infancia digna, a pesar de las dificultades que enfrentan sus familias.     

Escuchamos a Chang Mo Hu y Ma Duc Manh, actualmente estudiantes de noveno grado de la Escuela Preuniversitaria-Internado de Thu Lum:

“Mi familia es pobre y muy numerosa. A mí me adoptaron los soldados Guardafronteras. Gracias a su apoyo, puedo ir a la clase y me siento muy feliz. Sueño con ser soldado y ayudar a la gente cuando sea mayor”.

“Viviendo aquí junto a los soldados, aprendo muchas cosas de ellos, como mantener limpias y ordenadas las cosas, y ser más prudente en la vida. Me esfuerzo por estudiar bien y ser después un buen soldado como ellos”.

Éstos son solo dos de los seis menores a los que, desde 2008, el Puesto de Guardia Fronteriza de Thu Lum adopta, cría y facilita el estudio. De esta forma, no solo comparte los costos económicos con las familias de esos niños, sino que además les contribuye a hacer realidad sus sueños y ayuda a las escuelas de la zona a mantener los niveles de escolaridad y mejorar la calidad educativa. El maestro Nguyen Van Duy, vicerrector de la Escuela Preuniversitaria-Internado de Thu Lum, consideró:

“Este modelo de asistencia es muy práctico porque genera motivación y anima a los menores a asistir a las clases y no abandonar sus estudios, como solía pasar en los años previos. De esta forma, ayuda a las escuelas a elevar la tasa de escolaridad y la calidad de la educación”. 

Además de cuidar a los chicos, los soldados también los apoyan en sus estudios. (Foto: VOV)

Impregnados de un entorno militar, esos hijos adoptivos aprenden de los soldados la disciplina, destrezas y habilidades para sus vidas, cómo mantener una mente positiva, lecciones de autoconfianza en la comunicación con otras personas y un buen comportamiento hacia las gentes que los rodean.     

Además de cuidar a los niños en el mismo Puesto de Guardia Fronteriza de Thu Lum como si fueran sus verdaderos hijos, los soldados mantienen contactos regulares con sus familias y sus maestros, para recibir información actualizada sobre su actividad escolar y adoptar las medidas necesarias para ayudarlos a mejorar sus resultados académicos. Tong Thanh Son, director de la Sección de Educación y Formación del distrito de Muong Te, comentó: “El programa de adopción de los puestos de Guardia Fronteriza reviste un gran significado al brindar alegría, no solamente a los niños de grupos étnicos beneficiarios, sino también a las escuelas donde estudian y al sector educativo local. Gracias a este proyecto, las habilidades en el estudio de los hijos adoptivos mejoran de modo considerable y, en especial, aumenta la tasa de asistencia escolar”.

Partiendo de los positivos resultados obtenidos, este modelo de hijos adoptivos se ha extendido a varios puestos de la Guardia Fronteriza de Lai Chau y otras provincias de Vietnam. En la actualidad, en Lai Chau, cerca de 60 alumnos de minorías étnicas han sido adoptados por estas unidades militares, de ellos, un tercio son del distrito de Muong Te. Ellos serán los que sembrarán las semillas del conocimiento en sus aldeas, contribuyendo a la construcción y el desarrollo de su localidad.