(VOVworld) – Para la minoría étnica Thai blanco, el "Tết Xíp Xí" es una costumbre original que forma parte de su vida espiritual.

“Me gusta mucho el “Tết Xíp Xí” porque tengo oportunidades de comprar nuevas prendas y jugar al futbol y al “ném còn” (lanzamiento de pelota de tela)”. Tal es el sentimiento de Dieu Thi Tuyen, de la comuna de Muong Giang, distrito de Quynh Nhai, provincia norteña de Son La sobre el “Tết Xíp Xí”, la principal efeméride de la minoría étnica Thai blanco en la región del noroeste de Vietnam.

“Xíp Xí” significa catorce en el dialecto Thai. Esto quiere decir que ellos celebran esta festividad el 14 de julio del calendario lunar. Según la concepción de los Thai blancos, el “Tết Xíp Xí” es una ocasión para que las generaciones más nuevas retornen a su origen y los adultos presten atención especial a los niños, razón por la que se denomina también “fiesta de la infancia”. En estos días, los niños lucen vestimentas coloridas adquiridas por sus padres y abuelos. Además, propicia valoraciones preliminares y celebrar los logros laborales en los primeros 6 meses del año. Por su parte, los críos no tienen que conducir el búfalo ni realizar otras faenas y así disfrutan de las actividades recreativas. Ha Thi Dieu, habitante de la comarca de Quang Huy, distrito de Phu Yen informó: “Los niños deben conducir el búfalo en los días hábiles y por eso debemos empaquetar arroz glutinoso y tortillas para que los coman en el camino. Sin embargo, cada vez que viene el “Tết Xíp Xí”, los niños salen juntos después del almuerzo”.

El “Tết Xíp Xí” tiene dos partes. La primera es “mo” que significa veneración a los ancestros para agradecerles sus aportes a la construcción de canales y aldeas. La segunda es la fiesta gastronómica e intercambios culturales y artísticos. En la parte “mo”, las ofrendas incluyen aguardiente, carne y "khẩu cắm” (arroz glutinoso teñido de diferentes colores) y por supuesto, dos cosas indispensables: carne de pato y “bánh ít” (tortilla de arroz glutinoso). Según explicaciones de la minoría étnica Thai, el pato se vincula al campo, ríos, arroyos y la producción de los lugareños, por lo que se ofrenda carne de ave a los antepasados con el deseo de que el animal se coma los insectos que perjudican la cosecha y se vaya la mala suerte por la corriente de ríos y arroyos. Entretanto, el “bánh ít”, o sea la tortilla, se empaqueta en pares para simbolizar la felicidad de las parejas.

Los Thai blancos celebran el “Tết Xíp Xí” conforme a la tradición de cada familia. Después de las actividades de culto, los miembros del hogar se juntan en un círculo alrededor de un convite para brindar por la salud y prosperidad. Además, representa una ocasión para destacar la hospitalidad de la etnia. Los visitantes son invitados con varios días de antelación. Cuanto más sean los huéspedes más suerte tendrá la familia. En un ambiente de júbilo, los aldeanos siempre les recuerdan a sus parientes moderar sus actividades para garantizar la santidad de la celebración, la seguridad y salud. Ha Ho Bac, habitante de la comuna de Huy Tan, distrito de Phu Yen compartió: “Según las normas del “Tết Xíp Xí”, los lugareños deben garantizar que las actividades recreativas sean sanas, y evitar el despilfarro. Por ejemplo, no se incentiva la borrachera para reducir accidentes de tránsito”.

Además de las actividades gastronómicas y ociosas, el “Tết Xíp Xí” incluye “khắp chắp muôn” (canto de felicitaciones), “khắp sòn côn” (canto para enseñar la razón de ser) y “khắp báo sao” (canto de intercambio de amor) cuando se realizan visitas recíprocas o se brindan en el banquete. Los que han participado en el “Tết Xíp Xí”, recordarán para siempre imágenes de estos días festivos.