Música sinfónica en las calles de Hanoi

Como los demás días del año, a finales de este noviembre las calles de Hanoi siguen repletas de gente y vehículos con sus ruidos estruendosos. De repente se escucha un melodioso concierto clásico en una esquina donde generalmente se interpreta teatro. Lo sorprendente es que estas funciones musicales se desarrollan en la acera, ante el asombro de numerosas personas.

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Nuevo ambiente de la música sinfónica en Hanoi (Foto:VnExpress)

     “Luala concierto” fue un programa musical clásico presentado al público hanoyense en un día especial: 11 de noviembre de 2011. Esta función artística fue el resultado de la coordinación armoniosa entre Luala Fashion, la Editorial Musical y la Orquesta Sinfónica de Vietnam. “Luala concierto” fue interpretado en la acera de la Editorial Musical de Vietnam, número 61 de la calle de Lý Thái To, en el centro de Hanoi, rodeada por construcciones clásicas francesas. Esta buena ubicación, rica en carácter cultural, fue seleccionada para presentar los conciertos sinfónicos gratuitos cada fin de semana, para darle al pueblo y los turistas una oportunidad de disfrutar de la música académica. En el lugar de presentación no hay escenario ni un director de orquesta con levita o artistas con camisa blanca y zapatos brillantes. 20 instrumentistas se sentaban con sus sillas en la acera, interpretando distintas obras bajo las luces amarillas y el viento ligero del otoño de Hanoi. Aunque los artistas se visten muy simple, las piezas musicales ejecutadas por ellos son de altura. Resuenan en las calles famosas obras de cámara de Johann Strauss, Mozart, Vivaldi, Tchaikosky, así como las inmortales de Bach y Greig. Entre los sonidos de claxones de vehículos y las risas de los transeúntes, los instrumentistas se presentan durante 2 horas, haciendo que los expertos en música exclamen que su interpretación es igual que la de un teatro de la ciudad.

   La aparición de los artistas en el programa musical sinfónico otoñal e invernal “Luala concierto 2011" hizo más románticas las tardes de los fines semanales en el casco de Hanoi. Parece que los sonidos melodiosos frenaron los pasos acelerados de los transeúntes y muchos de ellos se detuvieron a escucharlos. Los oyentes escucharon con tranquilidad para disfrutar integralmente de este singular espacio musical callejero. Después de algunos minutos de asombro, los recién llegados a Hanoi también toman fotos, escuchan y comentan. Las obras sinfónicas presentadas ayudaron al público a acercarse a este género. To Quoc Hien, un hanoyense, expresó: “El ambiente ontoñal es muy bonito y la presentación de la música sinfónica hace más animada la ciudad. Me gusta mucho esta presentación, es una pena que no lleve cámara para filmar esta escena. Seguramente volveré a este lugar para ver las funciones musicales.”

  Según el plan, el programa Luala Concierto será interpretado durante noviembre y diciembre de 2011, de las 15 a las 17 de la tarde de cada sábado y domingo, y una tanda dominical de las 10 a las 12. Según el señor Do Ngoc Minh, representante de la marca Luala, para escuchar música sinfónica antaño se precisaba llegar a tiempo al teatro, vestirse bonito, no reír y hablar en voz baja. Sin embargo, cuando se presenta la música sinfónica en la calle todas las personas pueden participar. Por ello, los organizadores quieren crear un juego espontáneo con la consagración de los artistas para llevar al público a acercarse a la música sinfónica. “Nuestra idea no sólo consiste en presentar la música clásica conforme a las normas comunes, con un teatro y los estándares auditorios, sino también en acceder al público de manera más fácil para que cualquier persona pueda contactar con este género musical.”

 Con la idea de llevar la música clásica al pueblo, el músico Tran Manh Hung, el violinista Xuan Huy y los artistas del Concierto Sinfónico y la Academia de Música de Vietnam ejecutaron exitosamente el programa inicial. En las recientes funciones musicales en las calles el número de espectadores aumentó incesantemente. Aunque el espacio era abierto, predominó la calma, a pesar de no haber fuerzas de seguridad. Parece que la belleza del sonido hizo que los ruidos en las calles se acallaran. Los ritmos melodiosos de las obras sinfónicas vuelan en los barrios antiguos de Hanoi, haciendo más romántico y apacible el otoño en esta capital. Esas interpretaciones musicales han contribuido a crear calles civilizadas y constituye una nueva actividad cultural que hará más atractiva esta ciudad a los ojos de los visitantes nacionales y extranjeros. /.     

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