(VOVworld) –Nguyen Thi Xuan trabaja desde hace 30 años como enfermera en el Centro de atención a pacientes con lepra Qua Cam ( hoy Hospital de enfermos de Lepra y Dermatología de la provincia Bac Ninh). Con su entusiasmo en favor de los desfavorecidos, esta enfermera fue una de las homenajeadas en el movimiento de estudiar y seguir el ejemplo moral de Ho Chi Minh.
La enfermera Nguyen Thi Xuan conversa con una paciente de avanzada edad
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La lectura del libro “El optimismo en las zonas montañosas”, que describe el sufrimiento físico y espiritual soportado por los enfermos con lepra, cambió literalmente la vida de la joven Nguyen Thi Xuan. Desde entonces, decidió vincularse con el Centro de atención a pacientes con lepra Qua Cam para ofrecer sus servicios médicos a esas personas. Con una devoción exclusiva, esta enfermera no dudó en hacerse cargo del cuidado de los pacientes que sufren esa enfermedad infecciosa, sin requerir ninguna recompensación. Ella los baña y les prepara comidas, así como los ayuda a curarse lesiones progresivas y permanentes en la piel, entre otras atenciones.
Además de ofrecerles cuidados médicos, la enfermera comparte sus penas y alegrías de la vida cotidiana. Ellos admiran su coraje y dedicación, y viceversa. También consideran a Nguyen Thi Xuan como un miembro de su familia, sobre lo que ella expresó: “Estoy feliz de cuidar a estos pacientes y los considero como mis parientes. Como enfermera, me esfuerzo por cumplir y seguir las enseñanzas del presidente Ho Chi Minh sobre la ética profesional de los médicos, razón por la cual los quiero y los trato como miembros de mi familia”.
Con el deseo de brindar una mejor atención médica, Nguyen Thi Xuan siempre trata de aprender y adquirir más conocimientos profesionales. Al mismo tiempo participó en un curso sobre prótesis ortopédicas para los pacientes con lepra. Luong Trung Hau, director del Hospital de Lepra y Dermatología de Bac Ninh, dijo lo siguiente: “Aquí tratamos a los enfermos de lepra con piernas y brazos amputados. Están solos y con necesidad de atención constante. Se trata de un trabajo muy duro por lo que la gente común no puede trabajar en este entorno. Estamos felices y orgullosos de contar con enfermeras dedicadas y fieles a su trabajo como Nguyen Thi Xuan.”
Aunque se jubiló en 2012, Nguyen Thi Xuan continúa trabajando en el Centro de atención a pacientes con lepra Qua Cam, al que considera como su segunda casa. La enfermera habló con un profundo sentimiento: “Tengo sólo un deseo, estar aquí para ayudar a los pacientes con lepra. Espero poder hacerlo hasta el final de mi vida. Si me voy, nadie puede hacer las prótesis, reparar zapatos, cucharas, cuencos y bolígrafos para los enfermos.”
Ella crea zapatos para los pacientes con piernas mutiladas debido a la lepra
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El altruismo de esta excepcional enfermera ha tenido repercusión entre los médicos, estudiantes y personal que atiende a los pacientes. Ho Ngoc Thu, una estudiante de la Universidad de Medicina de Hanoi, expresó su admiración ante la dedicación y fidelidad de Nguyen Thi Xuan a su trabajo. Al respecto, comentó: “Admiro la generosidad de la señora Xuan. Es una enfermera responsable y altruista, así como un gran ejemplo para yo seguir. Creo que ella encarna las palabras del presidente Ho Chi Minh de que los médicos deben ser buenas madres.”
Sin descanso, Nguyen Thi Xuan suele trasladarse en moto para visitar los cercanos centros de pacientes con lepra y movilizar recursos financieros para ayudar a los necesitados. Gracias a su trabajo y generosidad, estos enfermos se sienten apoyados y hasta pueden olvidar su dolor para reintegrarse a la sociedad.