(VOVWORLD) - Dan da, conocido como litófono de piedra, apareció hace miles de años en Tay Nguyen, las tierras altas centrales de Vietnam. Su música suena como el eco que se produce en medio de los profundos bosques y entre las majestuosas montañas, así como el ritmo de los arroyos en la región. Esos sonidos parecen las palabras de consuelo que acompañan a los autóctonos tanto en los momentos alegres como en los tristes de su vida.
Un instrumento de piedras de Tay Nguyen |
En 1949, un grupo de peones camineros descubrió en Ndut Lieng Krak, provincia de Dak Lak, un conjunto de 11 piedras grises de diferentes medidas y grosores que parecían haber sido elaboradas por manos humanas. Esta colección fue enviada a Georges Condominas, un arqueólogo que trabajaba en la Escuela Francesa de Extremo Oriente en París. Tras estudiarla exhaustivamente, el experto y sus colegas concluyeron que ese no se parecía a ningún otro instrumento de piedra reconocido por la ciencia hasta aquel momento. Esas piedras planas se conservan actualmente en el Museo del Hombre en París, Francia.
Desde su hallazgo, se han descubierto otras 200 piezas de ese tipo esparcidas en varias provincias en el sur de la región de Tay Nguyen. Cada conjunto consta de 3 a 15 piedras, pero los más famosos son los de Khanh Son, Bac Ai, Tuy An y Binh Da, llamados según el nombre de los lugares donde fueron encontrados.
Interpretación musical con el litófono de piedra, dan da |
Sobre la base de las piezas halladas en Binh Da, los científicos afirmaron que esas piedras datan de unos 3000 años. Mientras, las excavaciones y exploraciones realizadas en el monte de Doc Gao, perteneciente a la aldea de To Hap, de la comuna de Trung Hap, provincia central de Khanh Hoa, corroboraron la elaboración de este instrumento en el lugar y dieron a conocer que la comunidad étnica de Raglai es la verdadera dueña de esos litófonos de piedra.
Al respecto, Pham Thanh Binh, funcionaria del Museo de la provincia de Khanh Hoa, dijo: “Según los arqueólogos, este sitio era un gran taller donde los prehistóricos tallaban instrumentos musicales de rocas, puesto que no solo encontraron las piedras grandes sino además las pequeñas que quedaron después de la talla. Coincidieron en que es la cuna de los litófonos prehistóricos”.
Gracias a su sensibilidad, capacidad auditiva y sentido de creatividad, los pueblos de Tay Nguyen tallaron el “da sung” o “da nham”, un tipo de roca metamórfica para crear este instrumento peculiar. Las piezas, de diferentes medidas y grosores, son colocadas las unas al lado de las otras para obtener diferentes sonidos al ser golpeadas con palos o martillos.
Los litófonos más antiguos fueron utilizados para espantar a los animales salvajes y proteger los cultivos. Más tarde, sirvieron en las actividades comunitarias. Los autóctonos los consideraron como un medio de comunicación especial entre el mundo de los vivos y el de los muertos, entre los seres humanos y las deidades, y entre el presente y el pasado. Por este significado, nunca faltaban en las celebraciones y los rituales ancestrales por la nueva cosecha y la fiesta de sacrificio del búfalo, entre otros.
En los últimos años, los investigadores y coleccionistas vietnamitas descubrieron otros conjuntos de piedra, como el hallado en la zona turística de Yang Bay, provincia de Khanh Hoa. Pham Quoc Tuan, funcionario del Comité de Administración del lugar, dejó saber: “Khanh Hoa alberga a 9 comunidades étnicas, pero la cultura de los Raglai es la más destacada. El instrumento musical de piedra de esta etnia es el más original en Vietnam. Sus sonidos siempre traen sensaciones muy especiales a los visitantes”.
Las piedras planas dan una escala de sonidos completa, aptas para la interpretación de varios géneros y estilos musicales, desde el folclórico hasta el contemporáneo y desde las piezas nacionales hasta las extranjeras. Natalia, una turista rusa en la zona turística de Yang Bay, expresó: “Me gusta mucho su litófono. He viajado a muchos lugares pero esta es la primera vez que disfruto de la música tocada con un instrumento de piedra tan increíble. Cuando el instrumentista interpreta una pieza popular de Rusia, veo que ya no existen las fronteras entre nuestras dos naciones. La música realmente nos acerca”.
En el transcurso del tiempo, aunque pasaron a tocar más gongs y batintines, las comunidades de la región de Tay Nguyen aún conservan varios conjuntos de piedra y transmiten la forma de tocarlos a las generaciones posteriores. Esos litófonos forman parte del espacio cultural de Tay Nguyen, reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.