Mientras el lanzamiento de bolas de tela como el ném pao y ném còn se juegan de día, el bádminton tradicional de la etnia Mong es una de las actividades nocturnas favoritas de sus muchachos y muchachas.

Sobre la producción de las raquetas y volantes, Giang A Hoa, residente en la comuna de Long Luong del distrito de Van Ho dijo: “Primero, el volante está hecho de plumas tomadas del ala de gallos. Por lo general, cuando se corta el cuello del gallo para la extracción de sangre, se arrancan las plumas de sus alas que son la parte más hermosa. Los gallos deben desplumarse antes de ser sumergidos en el agua hirviendo para que el volante gire de manera uniforme. La base del volante está hecha de un segmento de bambú corto, de 3 a 5 centímetros sobre la cual se colocarán de 3 a 5 plumas para que gire de manera uniforme. Para obtener el mejor producto, las plumas deben ser sacadas de alas de un gallo. Cuando se golpea el volante, este puede volar lejos. La raqueta está hecha de madera blanda de 20 centímetros de ancho, 25 centímetros de largo y lisa. El mango mide unos 10 centímetros de largo, es redondo como el de un cuchillo, lo suficiente para sostenerlo”.

Raquetas de madera en el bádminton tradicional de la etnia Mong. (Foto: baosonla.org.vn)

El juego generalmente se practica en una gran parcela de tierra o en el patio de la casa cultural de la aldea porque cuando se juega al aire libre, el volante a menudo vuela con el viento. Según cuentan las personas de avanzada edad, en el pasado, el bádminton tradicional era un juego popular principalmente entre mujeres solteras y niñas.

Al respecto, Giang A Hoa señaló: “El juego tiene principalmente dos formas, es decir, jugar en parejas o en grupos. Los dobles suelen ser un hombre y una mujer. La competición grupal es de muchas parejas. A la hora de jugar se dividirá en dos equipos, uno masculino y otro femenino. Durante el juego, competirán entre sí en el número de golpes y si cualquiera de los lados pierde, tienen que cantar una canción o cumplir con un reto que ambos lados hayan especificado. Esta es también una oportunidad para que los muchachos y las muchachas se conozcan mejor y muchas parejas se enamoren hasta construir una vida matrimonial”.

En muchas ocasiones, el juego dura hasta la mañana. Sobre este tema, Giang A Sang, radicado en la aldea de Hua Tat del distrito de Van Ho informó: “Nuestro grupo étnico Mong disfruta este juego en cada día festivo y en el Año Nuevo Lunar. Nos divertimos tocando la flauta, la zampoña y el violín de dos cuerdas. Desde el pasado hasta la fecha, este juego se ha mantenido y todavía está muy bien organizado en la actualidad. Al jugar, el muchacho encontrará a una muchacha a la que le gusta preguntarle, cantar una canción y confesar el amor”.

Cuando el muchacho entona melodías de amor, la muchacha le responde: “Si ya estás apasionadamente enamorado, entonces tú y yo saldremos a jugar el bádminton y cantaremos”. Cuando acuerdan jugar juntos, la pareja ya expresa su amor y, después, saldrán juntos.