En medio de la cuarta Revolución Industrial, los artesanos talentosos siguen siendo el alma de las aldeas de oficios tradicionales (Foto de ilustración)

Las aldeas artesanales de Vietnam no experimentaron realmente las revoluciones industriales 2.0 y 3.0. Por lo tanto, no es extraño que al acercarse a la tecnología 4.0 encaren muchas dificultades desde la producción, los negocios y la venta de los productos hasta la planificación para lograr un desarrollo sostenible. El profesor adjunto y doctor Nguyen Thua Loc, de la Universidad Nacional de Economía, estimó: “Cada aldea artesanal debe evaluar sus propias capacidades y determinar en qué etapa se encuentra. A partir de aquí podemos proyectar el camino a seguir. Además de invertir en la formación de talentosos trabajadores, los pueblos de oficios tradicionales deben reestructurar su organización y desarrollar los productos apropiados a las tendencias actuales, así como diversificar los mercados de consumo”.

De hecho, las aldeas artesanales vietnamitas han estudiado la posibilidad de aplicar nuevas tecnologías, incluida la automatización para aumentar la productividad laboral y disminuir el coste y el tiempo de producción. Aparte de eso, la cuarta Revolución Industrial les permite participar más profundamente en la cadena de suministro de las empresas nacionales e internacionales, un factor para garantizarles un buen flujo de sus productos. Luu Duy Dan, presidente de la Asociación de Aldeas de Artesanía de Vietnam, dijo:“Necesitamos establecer vínculos entre las bases de producción, los ministerios y las asociaciones en aras de definir la dirección apropiada para el desarrollo de las aldeas artesanales. Además de la formación de recursos humanos, es muy importante desarrollar las zonas de materias primas, invertir en los sectores clave y acelerar la promoción comercial y la publicidad”.

La tecnología 4.0 ofrece nuevas modalidades. Hoy en día, las tiendas ya no son los únicos puntos de venta. El comercio en línea ahora está en aumento e incluso las aldeas artesanales están desarrollando el concepto de interactividad, lo que significa que los clientes pueden ser invitados a participar en el diseño de productos. El subdirector del Servicio de Agricultura y Desarrollo Rural de la ciudad de Hanói, Ta Van Tuong, informó:“La cuarta Revolución Industrial conecta a todo el planeta, desde la economía del conocimiento hasta la inteligencia artificial. Los pueblos tienen que renovar sus productos. No necesariamente tienen que centrarse en término de cantidad, sino más bien crear productos con una identidad cultural nacional”.

Actualmente, Vietnam dispone de más de 5.400 aldeas artesanales con casi 50 oficios, que atraen a unos 11 millones de trabajadores. Sus productos se han exportado a 160 países y regiones del mundo, lo que genera anualmente un valor de exportación de mil 700 millones de dólares. Esta cifra demuestra que estos pueblos desempeñan un papel importante en el desarrollo socioeconómico nacional, especialmente en el contexto de la actual era de la cuarta Revolución Industrial. La introducción de tecnologías avanzadas obviamente es beneficiosa para su crecimiento económico y también es importante para la preservación de las tradiciones culturales de la nación.