Un barco de guardacosta de China en el Mar del Este. (Foto: AFP/VNA)

Grega destacó las recientes acciones unilaterales que han causado tensiones en esas aguas, como los ataques contra buques pesqueros vietnamitas en el archipiélago de Hoang Sa (Paracel) por parte de un barco chino, la intrusión del Haiyan 8 en las zonas económicas exclusivas (EEZ) de Vietnam y Malasia, y el establecimiento de los distritos de Xisha y Nansha pertenecientes a la ciudad de Sansha, con vistas a administrar los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa de Vietnam, lo que va en contra de la Declaración sobre la Conducta de las Partes en el Mar del Este firmada en 2002 entre la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) y China.

Estos incidentes también complican la situación en esa zona y perjudican el proceso de negociación entre Beijing y la Asean para lograr un Código al respecto, agregó.

Ante las acciones provocadoras de China, Grega enfatizó que los pescadores vietnamitas deben trabajar con seguridad dentro de las aguas de su país y que las tensiones en el Mar Oriental deben abordarse en el marco de las leyes internacionales, especialmente la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 (Unclos).