(VOVWORLD) - Hasta el 7 de septiembre, el conflicto entre el movimiento islámico Hamás e Israel en la Franja de Gaza entró en su duodécimo mes. Hay pocas señales de que los combates vayan a terminar pronto en el territorio del Oriente Medio.
 Edificios destruidos tras un ataque aéreo israelí en la Franja de Gaza el 30 de agosto de 2024. (Foto: Xinhua/VNA)
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Según los analistas, será bastante escasa la posibilidad de lograr un alto el fuego o de que Hamás libere a rehenes israelíes a cambio de prisioneros palestinos capturados por Tel Aviv cuando ambas partes mantienen su postura.
Actualmente, Hamás exige que Israel retire completamente sus tropas de Gaza. Sin embargo, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció que el ejército del país hebreo debe mantener su presencia en una importante franja de tierra a lo largo de la frontera entre Gaza y Egipto.
En esa ocasión, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, pidió crear una alianza de países musulmanes para establecer una alianza unida contra la creciente amenaza de Israel, al mismo tiempo que condenó el conflicto prolongado durante 11 meses de Israel en la Franja de Gaza, que ha causado casi 150.000 víctimas, la mayoría de ellos civiles.
El mismo día, se llevó a cabo en Tel Aviv y muchas otras grandes ciudades una campaña de protesta masiva sin precedentes en la historia de Israel, con alrededor de 500.000 participantes, para pedir al gobierno israelí alcanzar inmediatamente un acuerdo de alto el fuego con las fuerzas de Hamás.
Los manifestantes portaban numerosas pancartas y coreaban consignas pidiendo a la administración del primer ministro Netanyahu un acuerdo de alto el fuego con las fuerzas de Hamás a cambio de la liberación de los rehenes. Además, en Tel Aviv, también se celebraron protestas simultáneamente en las ciudades de Jerusalén, Haifa, Kfar Saba, Beersheba, Netanya, Rishon Lezion... con decenas de miles de participantes.