(VOVworld) - Actualmente en Vietnam se registran unas 500 mil empresas privadas, que constituyen una fuente de empleo  para 15 millones de personas y aportan dos tercios del ingreso nacional. Por eso, en los últimos tiempos, Vietnam ha adoptado varias políticas para formar un bloque empresarial privado, especialmente en la etapa de una intensa integración global.

El sector económico privado apoya el crecimiento de la economía nacional al aportar cerca del 40 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y es un elemento importante en la estructura inversionista. En 2015, la contribución de este sector al PIB creció 3 veces en comparación con 2010. Se trata de una importante  fuerza que genera puestos de trabajo y soluciona problemas sociales.

Por eso, el duodécimo  Congreso del Partido Comunista  de Vietnam afirmó que la construcción de una economía de mercado con orientación socialista es un objetivo importante, y las empresas privadas deben ser un motor principal para el desarrollo económico.

Las empresas privadas crean empleos para 15 millones de personas y aportan dos tercios del ingreso de Vietnam

Sin embargo, la mayoría de estas sociedades carecen de cohesión, y su capacidad de responder a los riesgos es limitada, por lo que muchas tuvieron que suspender sus operaciones y algunas incluso se disolvieron. Además, el derecho libre negocio no se ha promovido debidamente, el entorno de negocios no es suficientemente abierto y la competitividad todavía es débil.

Tran Kim Chung, vicetitular del Instituto Central de Administración Económica, recomendó: “Para convertir la economía privada en una motivación para el desarrollo, hay que perfeccionar el mecanismo mercantil. Se trata de un factor básico en la próxima etapa. Necesitamos aumentar la transparencia, renovar el papel administrativo del Estado, estabilizar la macroeconomía y eliminar las fallas  que afecten la eficiencia inversionista”.

Para poner en alto el rol motivador del sector privado en la economía nacional, el gobierno vietnamita aportó varias soluciones sincrónicas. Las empresas definen sus ventajas de competitividad y deficiencias,  y elevan su capacidad de gestión.

Pham Thi Thu Hang, secretaria general de la Cámara de Comercio e Industria de Vietnam (VCCI), comentó: “La Cámara está recogiendo recomendaciones del empresariado para presentarlas al gobierno. Con la promulgación de la Resolución sobre la asistencia y el desarrollo empresarial hasta 2020 del gobierno, se creó un programa de acción para ayudar a las compañías del sector privado y de pequeña y mediana escala a fin de generar más recursos para ellas”.  

El gobierno vietnamita considera a las empresas con capitales de inversiones extranjeras directas (IED) y a las domésticas como una comunidad de alta unidad y eficiencia. Además, la Constitución  de 2013 de Vietnam evaluó que las compañías de IED son un área  económica dinámica del país. El primer ministro Nguyen Xuan Phuc, al intervenir en un reciente  Foro Empresarial, afirmó que Vietnam continuará perfeccionando las instituciones de economía mercantil, las políticas jurídicas y las reformas administrativas para  impulsar el sector privado.

Al respecto, el jefe de gobierno señaló: “En cuanto a las firmas de IED, el gobierno espera una cooperación constante de este sector con la reforma de Vietnam, así como su participación en el impulso de la transferencia de tecnologías modernas, capacitación de los recursos humanos y  protección de los naturales, entre otras tareas”.

En su estrategia de desarrollo socioeconómico 2016-2020, Vietnam ofrecerá condiciones favorables para el avance del sector empresarial, especialmente las entidades privadas, para elevar la competitividad de la economía nacional. El gobierno también se esforzará para promover la conexión entre las entidades y así impulsar la macroeconomía.