(VOVworld) – Ministros de Finanzas de la eurozona acordaron el 25 de febrero prorrogar por un plazo de 4 meses el paquete de asistencia para Grecia después de aprobar las reformas presentadas por el gobierno de este país. Se trata de su primer logro para superar el riesgo de quiebra. Sin embargo, queda camino por andar ya que al beneficiarse del rescate durante los próximos 4 meses, el Partido Syriza del primer ministro Alexis Tsipras no cumple sus compromisos electorales.

Las reformas griegas incluyen medidas contra la evasión fiscal, el contrabando de materias primas y tabaco y la reestructuración estatal. Se trata de las soluciones a la crisis humanitaria, el ajuste de deudas fiscales y de morosidad y el fin al desahucio por la falta de pago. Un total de18 ministros de Finanzas de la eurozona apoyaron la lista presentada por el primer ministro de Grecia, Tsipras. Según el plan, se desembolsará la asistencia después de que se aprueben los detalles del nuevo programa de desarrollo económico de Atenas. De momento, la Unión Europea y Grecia cumplen los últimos procedimientos, entre ellos, la votación en algunos parlamentos miembros de la unión monetaria dentro de pocos días.

Concesión del Gobierno de Atenas

En este sentido, Grecia goza de otros 4 meses de rescate financiero nada más terminar el actual paquete de asistencia el 28 de febrero. Durante el plazo adicional, el Gobierno heleno debe planificar un itinerario para cumplir sus compromisos bajo la supervisión de instituciones internacionales. Analistas opinan que aunque no se trata de un acuerdo deseado por ambas partes, desarticula la tensión que provocaría la división entre Grecia y la Unión Europea tan profunda que resulta difícil de cicatrizar. Es la única solución. Atenas necesita otro rescate para evitar la quiebra mientras que el bloque europeo no puede abandonar al Gobierno griego para prevenir el desorden regional y el efecto dominó de sus programas de asistencia.

Sin embargo, para el país heleno, es evidente que dicho acuerdo no beneficia mucho a su población en el contexto en que el Partido en el poder del primer ministro Alexis Tsipras mantiene un criterio categórico contra la política de austeridad de la Unión Europea. En su primer discurso después de recibir otro plazo de 4 meses de rescate, el premier griego reconoció que el pacto contribuye al fin de las medidas de austeridad pero que Atenas debe pagarlo con nuevas concesiones.

Retos para recién instaurado gobierno de Grecia

Tsipras afirmó también que su Gobierno hará todo lo posible para encontrar una solución que beneficie a ambas partes sobre la base del respeto recíproco y a las regulaciones europeas, conforme a las aspiraciones de los electores. Sin embargo, analistas lo califican de “imposible”. Primeramente, los compromisos del primer ministro Alexis Tsipras no han sido cumplidos, al menos tampoco dentro de los próximos 4 meses. A diferencia de las declaraciones categóricas del jefe del Gobierno heleno a los acreedores antes de asumir su cargo que apoyaban la eliminación de los paquetes de asistencia, el alivio de la austeridad y el fin a la cooperación con la troika de acreedores internacionales compuestos por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional, el Gobierno griego debe ceder ante sus demandas, lo que enfrenta el rechazo crítico de la opinión pública en el país. La oposición estimó que el Gobierno de Tsipras sigue la vieja senda de sus antecesores con los paquetes de asistencia y que el Partido Syriza ha incumplido compromisos electorales, lo que representa un retroceso del proceso de reforma democrática. El primer ministro Alexis Tsipras enfrentará con prontitud la primera protesta contra el Gobierno luego de la convocatoria de las manifestaciones contra sus reformas por parte de algunos partidos. Organizadores de la protesta revelaron que a las masas les decepcionan las acciones del Gobierno y al mismo tiempo exhortan al aumento del salario mínimo, la reforma del mercado laboral, el mejoramiento de servicios sanitarios, educativos, entre otros servicios públicos.

Los 4 meses por delante es un plazo suficiente para que Grecia y sus acreedores tracen un itinerario apropiado para realizar las reformas conforme a los beneficios comunes. El mayor reto recae en la parte del Gobierno de Atenas, es decir, gozar del rescate financiero, practicar la austeridad y mantener la confianza de los electores. Estas son sólo las primeras dificultades.