(VOVworld) – Después de 11 años de negociación, Irán y las potencias mundiales alcanzaron este 14 de julio en Viena, Austria, un acuerdo completo sobre el controvertido programa nuclear del país persa. Este es un gran logro de política tanto para el presidente estadounidense, Barack Obama, como para su homólogo iraní, Hassan Rouhani, que puso fin a décadas de enfrentamiento. Es más, podrá cambiar la situación del Oriente Medio.
Los cancilleres de Irán y Rusia y el secretario de Estado de Estados Unidos, entre otros, posan para la foto, después de lograr el acuerdo (Fuente: Reuters)
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Entre los puntos clave del acuerdo recién aprobado, Irán deberá eliminar las dos terceras partes de sus centrifugadoras que tiene instaladas para enriquecer el uranio, y disminuir la cantidad de uranio de bajo enriquecimiento. Entonces, las centrifugadoras que no se usan serán guardadas en algún lugar, bajo la custodia de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA). Además, las bases nucleares de Irán serán sometidas a la inspección constante de esta institución internacional. A cambio, se levantarán todas las sanciones que pesan sobre Irán vinculadas con su programa nuclear. Sin embargo, esta medida volverá a aplicarse dentro de 65 días por cualquier violación del acuerdo por parte de Teherán. Sin embargo, las sanciones de la ONU se mantendrán durante los próximos 5 años en el caso de las armas y durante los próximos 8 años en el caso de los misiles balísticos.
Triunfan los esfuerzos diplomáticos persistentes
Así pues, después de 11 años de prolongadas negociaciones y 18 días de intensas conversaciones en Viena, Austria, se consiguió el esperado acuerdo final sobre el tema. El acontecimiento ha recibido una reacción positiva de la comunidad internacional. Lo consideran un acuerdo histórico, que permite cerrar uno de los expedientes candentes, en estancamiento durante años. Particularmente para el presidente estadounidense, Barack Obama y su par iraní, Hassan Rouhani, este es un gran éxito en cuanto a la política. El acuerdo ayudará a Irán a salir del cerco y llevará la economía de este país, agobiada por las sanciones, a la recuperación con la vuelta de su petróleo al mercado internacional. Mientras tanto, evitará el despliegue por el gobierno del presidente Barack Obama de la medida militar, que seguramente arrastrará consecuencias imprevisibles no solamente en el Oriente Medio.
Analistas consideraron el acuerdo alcanzado por Irán y las seis potencias del Grupo P5+1, Estados Unidos, China, Rusia, Francia y Reino Unido mas Alemania, como un triunfo de los empeños diplomáticos perseverantes, destacando el papel de los individuos, como Barack Obama y Hassan Rouhani. Al asumir el poder, Obama afirmó la importancia de encontrar una solución equilibrada entre el aislamiento y la colaboración, estimando que las “sanciones sin una actitud amistosa y denuncias sin debates”, nunca llevarán a nadie al triunfo. Mientras que su antecesor mantuvo una posición dura con los países incluidas en el llamado “eje del mal”, Obama opta por un enfoque más abierto, superando a veces la línea roja. No vaciló en realizar una llamada telefónica al nuevo presidente de Irán, Hassan Rouhani, en septiembre de 2013 para abrir camino a una ronda de negociaciones que duró 21 meses y llegar al histórico acuerdo del 14 de julio de 2015 sobre el tema nuclear de la República Islámica. Entre tanto, en Irán, la transición política llevó a Hassan Rouhani, conocido por su moderación, a la presidencia, y con su llegada al poder, las relaciones entre Teherán y Washington pasaron por una nueva etapa, más flexible que durante el mandato de Mahmoud Ahmadineijad con su dura actitud.
Abiertas oportunidades de inversión
El acuerdo todavía está en espera del ejercicio, pero obviamente suscitó un gran entusiasmo en los inversores mundiales. En China, Europa y Rusia, este acuerdo recibe una buena acogida de las empresas. Con una población de 77 millones de habitantes y la reserva de petróleo situada en el cuarto lugar en el mundo y la de gas solo después de Rusia, Irán representa un mercado lleno de potencialidades al cual muchos inversores desean acceder. Además, la carencia de mercancías, servicios y artículos de consumo, tras largos años de sufrir el embargo, motivará la inversión de las empresas de venta minorista de primer orden del mundo. De acuerdo con pronósticos de expertos en finanzas, el levantamiento parcial de las sanciones contra Irán abrirá las puertas de la bolsa de valores de Irán a los inversionistas a principios de 2016 y los capitales vertidos en este mercado en este año podrán llegar a mil millones de dólares.
Impactos en la seguridad de la región del Oriente Medio
Además de propiciar la cooperación entre Irán y el mundo, el acuerdo nuclear recientemente conseguido ejercerá grandes influencias en la seguridad en el Oriente Medio. Este acuerdo abrirá la puerta a los arreglos políticos no solamente para la guerra en Siria, sino además en Iraq y Yemen, entre otros. Irán está desempeñando un papel importante para el gobierno del presidente Bashar al Assad y las fuerzas hutíes rebeldes en Yemen. Es también un factor clave en el combate al grupo yihadista Estado Islámico. Por otro lado, al echar una mano a Irán, Washington obtendrá condiciones más favorables para intervenir en la región.
Actualmente, se debe esperar completar procedimientos necesarios para la aprobación oficial del acuerdo nuclear definitivo con Irán. Su implementación requerirá meses y dependerá de la respuesta de Teherán a las demandas planteadas por las potencias. Sin embargo, nadie puede negar el viraje que marca este acuerdo para abrir un nuevo capítulo en las relaciones entre Irán y el mundo. Lo más importante es cómo aprovecharán las partes las oportunidades generadas por el acuerdo para el desarrollo común.