Vietnam identifica 2025 como el año de “aceleración y avance”. De esta manera la diplomacia, además de buscar mantener un ambiente pacífico y estable, y cooperar con todos los países y socios para elevar la posición nacional, se centra en servir eficazmente al objetivo de crecimiento económico.

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La diplomacia económica es la nueva fuerza motriz

Vietnam ha firmado 17 Tratados de Libre Comercio (TLC) mantiene relaciones diplomáticas con 194 países, con los cuales ha suscrito más de 170 acuerdos de cooperación en múltiples sectores. En este 2025 busca implementar soluciones para aprovechar las oportunidades y el uso efectivo de los mecanismos de cooperación, con el objetivo de aumentar el atractivo de las inversiones en el país, ampliar los mercados de importación y exportación, e incrementar el intercambio comercial.

Las nuevas tendencias que están dando forma a la economía mundial, como la transformación digital, la transformación verde y la transformación energética, brindan a Vietnam oportunidades de prosperar, mientras este país se esfuerza por fortalecer una cooperación más profunda con los centros de innovación del mundo, incluidas naciones y empresas, en campos innovadores como la alta tecnología, los semiconductores, la inteligencia artificial y la cuántica. Éstos son nuevos motores de crecimiento que Vietnam ha identificado.

El viceprimer ministro y ministro de Relaciones Exteriores de Vietnam, Bui Thanh Son, habla en una reunión informal entre esta cartera y las agencias de prensa vietnamitas con motivo del Año Nuevo Lunar 2025. (Foto: ttdn.vn)

Al respecto, el viceprimer ministro y ministro de Relaciones Exteriores, Bui Thanh Son, dijo lo siguiente: “El mundo se enfrenta a muchos acontecimientos complejos, impredecibles y difíciles de pronosticar, pero también se abren muchas oportunidades para que los países aprovechen nuevos motores de crecimiento, como la economía verde y digital, la ciencia y la tecnología, para prosperar. Vietnam alcanza nueva posición y mayor poder después de casi 40 años de renovación, y ante las urgentes exigencias de la época se puede decir que éste es el momento de la ‘convergencia’ para llevar al país a una nueva era. Para aprovechar al máximo estas oportunidades la diplomacia económica seguirá desempeñando un papel importante, con el espíritu de lograr una mayor eficiencia y un pensamiento más tajante y creativo”.

Con mercados que aún tienen mucho espacio como América Latina, Medio Oriente - África, Europa Central y Oriental, la diplomacia económica de 2025 promueve nuevas direcciones como desarrollar la industria Halal, acelerar la implementación de los TLC firmados, eliminar las barreras del mercado y superar los obstáculos técnicos a la hora de materializar el suscrito con la Unión Europea (EVFTA).

Otras tareas primordiales son persuadir a los miembros de la UE sobre la ratificación del Acuerdo de Protección de Inversiones (EVIPA) y el levantamiento de la tarjeta amarilla contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) impuesta a los productos vietnamitas, además de solicitar el reconocimiento de Estados Unidos a la economía de mercado de Vietnam.

En esta senda, la diplomacia económica desempeña un papel de conexión, creando condiciones para ayudar a las empresas y marcas vietnamitas a posicionarse en el mundo.

El viceprimer ministro y ministro de Relaciones Exteriores de Vietnam, Bui Thanh Son, y los delegados a la reunión informal entre esta cartera y las agencias de prensa vietnamitas con motivo del Año Nuevo Lunar 2025. (Foto: ttdn.vn)

Posicionar a Vietnam en la actual época

Continuando con las contribuciones nacionales a los problemas mundiales, los asuntos exteriores multilaterales de 2025 se centrarán en preparar y organizar con eficacia los eventos internacionales de importancia en el país, además de seguir asumiendo responsabilidades y tareas trascendentales en organizaciones y foros regionales y mundiales, como la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) y los mecanismos de las Naciones Unidas.

Hanói contribuye de manera más activa y responsable a las cuestiones comunes, especialmente al cambio climático, reduciendo las emisiones netas y promoviendo los Objetivos de Desarrollo Sostenible, al igual que participando más en actividades de mantenimiento de la paz, búsqueda y rescate, y ayuda humanitaria.

En el mundo interdependiente de hoy la estabilidad y el desarrollo de los países no pueden separarse del entorno regional y mundial.

Vietnam también se encuentra en un nuevo punto de partida histórico, llevando al país hacia una nueva era de despegue. En este proceso la diplomacia desempeña un rol cardinal, garantizando una posición nacional más favorable en la actual época y combinando la fuerza del país con sus ventajas en la comunidad internacional para servir al engrandecimiento del pueblo.

“El factor que asegurará el ascenso de la nación es un entorno de paz, amistad y cooperación que sea favorable al desarrollo. Por lo tanto, la tarea del sector diplomático es cómo consolidar y mantener firmemente esta situación frente a las fluctuaciones, creando condiciones para que el país entre en una nueva etapa de desarrollo. Los asuntos exteriores pueden desempeñar un papel creativo y motivador, abriendo nuevas oportunidades para que Vietnam progrese, combinando la fuerza interna con la externa, en la que la interna es fundamental y de largo plazo, mientras la externa es importante e innovadora”, enfatizó.

Con un mayor “poder blando”, la diplomacia continuará afirmando y difundiendo la imagen de un Vietnam independiente, autosuficiente, pacífico, amistoso y dispuesto a cooperar para el desarrollo. Al mismo tiempo, el sector seguirá contribuyendo a mantener una situación exterior favorable para el despegue nacional, ser pionero y avanzar en la atracción de recursos para servir a los objetivos de crecimiento.