(VOVWORLD) - La Embajada de China en Washington, Estados Unidos, emitió ayer una advertencia de que ninguno de los países se beneficiaría si estallase una guerra comercial, vista como respuesta a la elección del presidente estadounidense Donald Trump, quien anunció que impondrá un 10% de aranceles adicionales de impuesto sobre todas las importaciones procedentes de China tan pronto como asuma el poder el próximo enero.
 Puerto \de Qingdao, en la provincia de Shandong, China. (Foto: Xinhua/VNA)
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La declaración de la Embajada china afirmó que la cooperación económica y comercial entre los dos países "es fundamentalmente beneficiosa para ambas partes".
El anuncio enfatizó los esfuerzos de China para combatir el tráfico de drogas, a través de un acuerdo de cooperación entre el presidente Xi Jinping y su homólogo estadounidense Joe Biden el año pasado.
Además de China, Donald Trump también anunció una estrategia fiscal más amplia, dirigida a México y Canadá, con una propuesta de impuesto del 25% sobre todos los productos de estos países, debido a preocupaciones sobre problemas como la inmigración ilegal y el contrabando de drogas.