Foto de ilustración (VNA)

 Ese cohete, que puede ser el tipo Scud, voló unos 450 kilómetros desde la ciudad costera de Wonson, en la provincia norcoreana de Gangwon, aseguró. Corea del Sur y Estados Unidos coordinaron analizar dicho lanzamiento. El presidente surcoreano, Moon Jae-in convocó una reunión urgente del Consejo de Seguridad Nacional para tratar sobre el asunto. La agencia de noticias Reuters citando a una fuente de la Oficina del Gabinete japonés, informó que el proyectil podría caer en zonas económicas exclusivas de este país.

Mientras, el Comando del Pacífico de Estados Unidos anunció que siguió de cerca durante 6 minutos el lanzamiento del cohete de corto alcance de Corea del Norte desde las proximidades del aeropuerto de Wonsan hasta que cayó en aguas niponas. Afirmó que no es amenaza para la seguridad de América del Norte. Por su parte, el primer ministro japonés, Shinzo Abe, condenó este reciente acto de Pyongyang y se comprometió a estrechar la cooperación con otras naciones para evitar que se repita.

Se trata del noveno lanzamiento norcoreano de misiles balísticos este año. Con antelación, el 21 del presente mes, se efectuó el disparo del cohete de medio alcance Pukguksong-2. Washington y Seúl confirmaron que ese proyectil voló unos 500 kilómetros antes de caer en aguas del este de Corea del Sur.

Inmediatamente después, el viceministro ruso de Exteriores, Vladímir Titov, declaró que Moscú condenó el referido ensayo e instó a los países relativos a mostrar moderación.

Mientras, los enviados sobre el tema de Corea del Sur, Japón y Estados Unidos se comprometieron estrechar la colaboración tripartita en el Consejo de Seguridad para buscar sanciones más duras sobre Pyongyang.

Por su parte, políticos surcoreanos afirmaron que Corea del Norte enfrentará un mayor aislamiento y castigos más serios si continua con acciones iguales.