Naciones como Islandia y Bélgica ya expresaron su oposición, mientras que algunos países nórdicos y el Reino Unido se han comprometido a seguir apoyando el concurso y a mantener la neutralidad de la UER.

Un reportero toma una fotografía de una pantalla de televisión en  Wiener Stadthalle, sede de Eurovisión del próximo año en Viena, Austria, el 18 de noviembre de 2025. (Foto: REUTERS/Leonhard Foeger)

Al respecto, Martin Green, director del Festival de Eurovisión, declaró: "Esto no supone en absoluto una crisis para el Festival. El próximo año contará con unos 35 miembros. Es posible que cuatro o cinco no participen. Es su decisión y la respeto plenamente. Espero de corazón que regresen en 2027. Y también espero que estos miembros sigan transmitiendo el programa para que los aficionados de sus países que quieran verlo puedan seguirlo". 

En una reunión celebrada ese mismo día en Ginebra (Suiza), la UER decidió no celebrar una votación por separado sobre la participación de Israel en Eurovisión 2026, y en su lugar adoptó una serie de nuevas regulaciones para aumentar la transparencia y la equidad del sistema de votación, en particular limitando la intervención de gobiernos y terceros. 

Tras la confirmación de la UER de que Israel seguirá participando en Eurovisión 2026, cuyo festival se celebrará en Viena (Austria) en mayo del próximo año, el presidente israelí, Isaac Herzog, celebró la decisión y se comprometió a seguir promoviendo la presencia cultural de Israel en foros internacionales. 

La lista definitiva de países participantes en Eurovisión 2026 se anunciará antes de Navidad.