A la delegación se unieron la funcionaria encargada de Medio Oriente del Departamento de Estado de Estados Unidos, Barbara Leaf; el enviado especial del presidente de Estados Unidos para la cuestión de los rehenes, Roger Carstens, y el asesor principal Daniel Rubinstein, a cargo de las actividades del Departamento de Estado norteamericano en Siria.

Esta es la primera visita oficial de funcionarios estadounidenses a dicha nación árabe desde que las fuerzas de oposición ocuparon la capital Damasco y derrocaron al gobierno del presidente sirio Bashar Al Assad el 8 de diciembre.

Sede del Departamento de Estado de Estados Unidos en Washington DC. (Foto: Xinhua/VNA)

En una rueda de prensa para informar sobre la reunión oficial con el nuevo líder interino de Siria en Damasco, Barbara Leaf afirmó que durante la discusión, el líder de la oposición siria se comprometió a no permitir que los grupos terroristas en ese país creen amenazas tanto dentro como fuera del país.

Sobre el enfoque de Washington en torno a la cuestión siria, Barbara Leaf afirmó que la Casa Blanca apoya plenamente el proceso político liderado y asumido por los sirios, cuyo objetivo es lograr un gobierno inclusivo y representativo que respete los derechos de todos sus ciudadanos, incluidos los derechos de las mujeres, junto con la diversidad étnica y comunitaria de Siria.

Según anunció el Departamento de Estado de Estados Unidos, durante su permanencia, la comitiva se reunirá directamente con diferentes sectores de la sociedad local, entre ellos, representantes de grupos sociales, activistas, comunidades locales y figuras destacadas de Siria para escuchar sus opiniones sobre el futuro del país.

La visita de la delegación estadounidense se produjo en un contexto en que las naciones de Occidente están intensificando los contactos y conexiones con HTS para determinar si eliminan o no a este grupo de la lista terrorista.