(VOVWORLD) - El Centro Financiero Internacional (IFC, en inglés) de Vietnam debe asumir un papel proactivo en la vanguardia de los nuevos modelos financieros, generando un entorno propicio para sectores emergentes y sentando las bases de los pilares futuros del sistema financiero nacional.
Así lo afirmó el primer ministro Pham Minh Chinh durante la conferencia de implementación de la Resolución de la Asamblea Nacional sobre el Centro Financiero Internacional en Vietnam, celebrada este sábado en Ciudad Ho Chi Minh.
El primer ministro Pham Minh Chinh y otros delegados a la conferencia. (Foto: VOV) |
Durante su intervención, el jefe del Gobierno subrayó que la construcción exitosa del IFC traerá beneficios estratégicos y de gran alcance para Vietnam. En materia de capital, esta institución facilitará la conexión con los mercados financieros globales, atrayendo instituciones internacionales y flujos de inversión, al tiempo que optimiza y moviliza los recursos nacionales. En cuanto a servicios, permitirá el desarrollo de un ecosistema financiero y bancario moderno, alineado con los estándares internacionales. Ademas, impulsará un salto cualitativo en el mercado financiero vietnamita, mejorando su transparencia, eficiencia y nivel de integración con las normas globales y contribuirá a reforzar el papel, la reputación y la proyección internacional de Vietnam, facilitando una mayor participación en las cadenas de valor de la economía global.
Según el Premier, el IFC no debe entenderse simplemente como una zona urbana especial o un conglomerado de edificios financieros, sino sobre todo como un diseño institucional con mecanismos diferenciados, que sirva como laboratorio de políticas innovadoras y plataforma para nuevos modelos financieros. Se trata, dijo, de una base sólida para desarrollar los futuros pilares del sistema financiero del país.
“No construimos el IFC únicamente para recibir inversiones, sino para liderar activamente los nuevos modelos financieros, abrir espacio a las industrias emergentes, impulsar el desarrollo de activos digitales, la economía verde y otros pilares clave del futuro financiero. A partir de ahí, generará un efecto de arrastre entre el sistema financiero y la economía real, al servicio de la producción, creando valor añadido para todos los actores involucrados, inspirando y movilizando a quienes participan y contribuyen, y construyendo juntos un futuro de desarrollo sostenible", dijo.