(VOVWORLD) - La administración del presidente Donald Trump ajustará las medidas para evitar que la oleada de migrantes centroamericanos entre a suelo estadounidense a través de la frontera mexicana.
Inmigrantes centroamericanos en un lugar de refugio en Piedras Negras, estado de Coahuila, México, en su viaje a Estados Unidos. (Foto: AFP/VNA)
|
Una de ellas es aumentar el número de deportados a México mientras espera que los tribunales de Estados Unidos decidan sus solicitudes de asilo.
El secretario de Seguridad Nacional, Kirstijen Nielsen, dijo que la Agencia de Fronteras y Aduanas de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) movilizará a 750 oficiales a las zonas limítrofes para lidiar con un mayor número de migrantes.
Según cálculos publicado el mes pasado por CBP, se registraron aproximadamente 100 mil migrantes en la frontera en marzo, el nivel más alto en una década.