Según indicó el comunicado del Ministerio del Interior, se registra una elevada cifra de muertos en la región de Al Haouz y entre los heridos, hay cientos de casos en estado crítico.

  Además, se determinó que muchas personas seguían sepultadas entre los escombros causados por el terremoto. Las labores de rescate, en las que participaron miles de soldados y bomberos, se llevaron a cabo de forma ininterrumpida durante toda la noche para buscar supervivientes. Sin embargo, según algunas fuentes regionales, las fuerzas de rescate no han podido llegar a algunas comunidades de la zona cercana al epicentro del terremoto porque las carreteras estaban cortadas debido a los corrimientos de tierra. 

La Cruz Roja marroquí expresó la inquietud ante una posible creciente cantidad de muertos en las próximas horas después de que los equipos de rescate hayan llegado a las comunidades más devastadas en las profundidades de las zonas montañosas remotas.

En una directiva especial emitida anoche, el rey Mohammed VI también solicitó la creación de un Comité Especial para la reconstrucción post-terremoto con la tarea inicial de construir casas para las personas que perdieron sus hogares.

Decenas de países y organizaciones internacionales enviaron sus condolencias y expresaron su solidaridad con el pueblo marroquí. Muchos países de la región declararon su disposición a enviar fuerzas profesionales de rescate y ayuda humanitaria para ayudar a superar las consecuencias del terremoto.