Llevan primavera a islas lejanas

(VOVworld) – En vísperas del Tết 2015 (Año Nuevo Lunar de la Cabra), el buque 637 del Comando de las fuerzas marítimas de la quinta zona partió de la isla Phu Quoc para transportar artículos necesarios y obsequios para la nueva primavera a los soldados estacionados en diferentes islotes de avanzada en el suroeste de la patria. Pese a las dificultades, los paisajes maravillosos de las islas Tho Chu, Hon Khoai, Hon Chuoi, Nam Du y Hon Doc, así como el saludo caluroso de los cuadros y combatientes allí hacen que los visitantes se sientan como si estuvieran en su casa.

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Alimentos necesarios se transportan en el barco

Durante seis días de viaje de unas 500 millas náuticas, la delegación representante de nueve provincias sureñas de Vietnam transportan regalos pletóricos de cariño de la retaguardia a las islas para animar a los soldados en su desempeño en las islas del suroeste de la patria. Los barcos llevan allí el ambiente de la nueva primavera. Los obsequios y mensajes de felicitación en ocasión del Tết 2015 (Año Nuevo Lunar de la Cabra) constituyen soportes espirituales para los combatientes. Trinh Thi Ngo, de 68 años de edad, residente de la provincia sureña Kien Giang mostró su satisfacción ya que ha estado en islas de vanguardia del país. La señora compartió: “Me siento con energía para poder viajar a estas islas. Espero con ansia encontrarme con mis familiares allí para ver que tal va su vida. Cuando estaba en esos islotes, vi que los habitantes enfrentaban muchas dificultades pero al preguntar a los soldados sobre su calidad de vida, todos me dijeron que estaban bien, que no se preocuparan y que empuñaban las armas para defender la patria”.

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  ...y las macetas de la “mai” amarilla (albaricoque)


Para llegar a las islas, los miembros de la delegación deben viajar en diferentes medios de transporte. Las ondulaciones del mar provocan mareo a muchos pasajeros. Sin embargo, el cansancio parece disminuir después de que la delegación pisara las islas y recibiera la calurosa bienvenida de los soldados con cordiales apretones de manos y sonrisas cálidas. Do Thuy Hang, empresaria de la provincia sureña Hau Giang dijo: “Por primera vez viajo tan lejos de casa. Aquí, el cielo azul, el inmenso mar y el cariño de los soldados a los visitantes me conmueven mucho. En la isla siento la lejanía del camino desde tierra firme hasta los puestos de vanguardia donde se debe ahorrar cada gota de agua potable. Siento mucha simpatía por la vida de los combatientes que está dispuestos a sacrificarse por la defensa de la patria”.


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 Soldados cumplen preparativos para la fiesta de fin de año


La mayoría de los soldados estacionados en la isla son jóvenes y todos esperan con ansia reunirse con los compatriotas de tierra firme para conversar, apretarles las manos y en especial escuchar las melodías hermosas de las cantantes jóvenes. La voz de Kim Ngan, artista de la delegación de “cải lương Tây Đô” (melodrama innovador de la tierra Tây Đô) de la ciudad meridional Can Tho, parece una brisa que alivia el calor de los días soleados y calurosos de aquí.

Informados de la llegada de los visitantes, los soldados de los puestos de radar y guardafronteras preparan fervientemente manjares para recibir la delegación con las ollas de verduras y pollos, cultivados y criados por los combatientes y mariscos capturados por los pescadores locales desde la madrugada. Phan Thi Men, esposa del primer teniente Pham Tho Truong, encargado de la operación de radar del puesto 505 en la isla Hon Chuoi, quien acaba de llegar de Thai Binh para visitar a su marido reveló: “Aunque no viene todavía el Tết, los combatientes están muy ocupados preparando con entusiasmo manjares para los visitantes. El convite para hoy dispone de casi todas las comidas del Tết para la delegación. Todos se sienten muy felices”.


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Momentos de relajación


La primavera, al parecer, invade tempranamente las islas del Suroeste de la patria y alborozan a la gente. Luego de despedir a los combatientes, cada miembro de la delegación sale de los islotes llevando a tierra firme un corazón rebosante de bondad humana en el inmenso mar y las expectativas de una nueva primavera.
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