(VOVWORLD) - Estimados oyentes, los vietnamitas nacidos antes de 1980 recuerdan vivir en un período difícil. Entonces, la economía estaba totalmente subsidiada por el Estado. Sellos de distribución racionada de productos y libretas de abastecimiento, y largas filas de personas a la espera de recibir su porción de comida fueron los protagonistas de la vida socioeconómica de aquella época, conocida como “Thoi Bao Cap” o período de subsidio estatal. Como joven adulto de Hanói en aquellos años, Nguyen Minh Khanh abrió una cafetería llamada “Cu Xa” que hoy recuerda ese singular período del país, en general, y de la capital, en particular.
La fachada de la cafetería Cu Xa. (Foto: Tung Lam/VOV5) |
Ubicada en uno de los dormitorios más antiguos de Hanói en la calle Ton That Tung, la cafetería Cu Xa se mezcla con otras viviendas y, sin un letrero “antiguo” de color amarillo, resulta difícil para los transeúntes reconocer este espacio único.
Por lo general, la mayoría de las cafeterías de la capital suelen elegir emplazamientos hermosos y accesibles para atraer fácilmente a la clientela, pero en el caso de Cu Xa, es lo contrario a esta tendencia. Para acceder al local, los clientes deberán aparcar sus motos en la calle. Luego, se adentrarán en un callejón y subirán al segundo piso por la escalera de piedra del antiguo dormitorio de Khuong Thuong.
Al explicar el porqué de su elección, el fundador de Cu Xa, Nguyen Minh Khanh, compartió: “Quiero recrear un espacio que evoque el Hanói de la época del Bao Cap. Para ello, nada mejor que este lugar. Además, cuando inauguré mi negocio en 2017, aún no existía ninguna cafetería ubicada en el corazón de un antiguo dormitorio. De esa forma me convencí de que esta sería una idea única que atraería a muchas personas que disfrutan de aquello que es diferente”.
Se pueden encontrar golosinas y juegos típicos de los jóvenes vietnamitas nacidos en los años 80 o 90 del siglo pasado. (Foto: Tung Lam/VOV5) |
En Cu Xa, cada artículo se conforma como una imagen que recuerda a los viejos tiempos. Los clientes de esta cafetería podrán entretenerse ojeando las revistas Hoa Hoc Tro o Tuoi Tre, familiares para aquellos jóvenes que nacieron en los años 80 o 90, o divertirse con juegos de la infancia, como caballitos de mar o muñecos de madera. También podrán descubrir los objetos diarios de la vida de los hanoyenses en aquel difícil período de la economía planificada, tales como televisión en blanco y negro, teléfonos de disco de marcar, teteras de estilo soviético o termos de Rang Dong. Todos estos elementos se presentan con la intención de evocar el salón de una familias típica de Hanói durante los años de subsidio estatal.
Trung Anh, un hanoyense que frecuenta esta cafetería, dijo: “Personalmente, creo que este es un modelo de cafetería muy singular en Hanói porque me recuerda una infancia aparentemente perdida. Cada vez que vengo a Cu Xa, advierto un sentimiento familiar y tranquilo, vinculado a los viejos tiempos. El espacio y el estilo de este lugar me brindan momentos de relajación”.
Un rincón de la cafetería Cu Xa. (Foto: Tung Lam/VOV5)
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Al igual que Trung Anh, muchos jóvenes van solos a Cu Xa. Van a la cafetería simplemente a sentarse y terminar un poco de trabajo o a relajarse y disfrutar de momentos de paz leyendo libros o periódicos. Otros optan por las tardes del fin de semana para acudir a este lugar a charlar con algunos amigos. Pham Hien Linh, otra cliente habitual de la cafetería, dijo: “Mi asiento favorito de aquí es en el balcón, muy tranquilo y aireado. Mis amigos y yo solemos elegir un rincón para charlar y observar el flujo de la gente en la calle. Nos gusta especialmente la escena de los alumnos saliendo de la escuela porque me hace recordar bastante mi infancia”.
En un establecimiento que evoca la época “Bao Cap”, por supuesto, el menú tendrá opciones especiales. En Cu Xa, además de las bebidas clásicas que se pueden encontrar en una cafetería, los clientes podrán disfrutar de tentempiés que parecen haber desaparecido de las mesas de los restaurantes, como los fideos de niño, caramelos y chicles tailandeses. El precio de las bebidas resulta razonable, alrededor de unos 20 mil dong por una taza de café, es decir, algo menos de un dólar. Además, con su bebida, la clientela disfrutará de un paquete de palomitas de maíz y un té suave y tibio, como una invitación al estilo “Hanói de los años 90”.
El interior de Cu Xa Café. (Foto: Tung Lam/VOV5) |
Minh Khanh, el propietario, compartió: “Quiero que cuando la gente venga a Cu Xa, se sienta como si estuviera de regreso a los hermosos recuerdos de su infancia. Por eso queremos ofrecer un espacio y un menú que tienen mucho que ver con la infancia a los jóvenes adultos y que puedan regresar al pasado de la manera más auténtica”.
Sin el esplendor y las luces de la ciudad moderna que la rodea, la cafetería Cu Xa captura con facilidad los corazones de los hanoyenses que adoran la belleza de la nostalgia y que la consideran una forma de regresar a los viejos valores de la capital vietnamita en un periodo difícil pero también romántico.