(VOVWORLD) - Estados Unidos inició este martes una campaña para deportar a un gran número de inmigrantes ilegales devolviéndolos a México a través de las puertas fronterizas, en un afán por implementar la orden ejecutiva al respecto firmada como ley por el nuevo presidente Donald Trump inmediatamente después de su toma de posesión.
El Instituto Nacional de Migración (INM) de México informó ayer que las autoridades del país recibieron a los primeros 56 deportados en Ciudad Juárez, en el estado de Chihuahua, junto con otros 120 en la ciudad de Matamoros, en el estado de Tamaulipas. La mayoría de estos son mexicanos y venezolanos.
Según el plan, examinarán a los migrantes extranjeros deportados por Estados Unidos a México antes de llevarlos a la capital, Ciudad de México, para residir temporalmente mientras esperan los procedimientos de repatriación.
Migrantes en el cruce fronterizo de Chaparral en Tijuana, México, el 20 de enero de 2025. (Foto: Xinhua/VNA) |
Para aquellos deportados que sean ciudadanos mexicanos, el gobierno proporcionará a cada persona 2.000 pesos (97 dólares) para cubrir gastos de manutención y viaje mientras buscan reasentamiento.
Previamente, en el primer día de su toma de posesión el 20 de enero, el presidente Donald Trump firmó 10 órdenes ejecutivas relacionadas con la seguridad de la frontera sur y la deportación a gran escala de inmigrantes y contra la inmigración ilegal.
Trump dijo que el número total de inmigrantes ilegales que serán deportados podría llegar a 11 millones de personas, incluidos más de 4 millones de mexicanos.