La alegría de la familia de Y Dut Eban (camisa a cuadros) en el día del inicio de construcción de su nueva casa. (Foto: VOV)

Bajo el sol abrasador del mediodía, Y Dut Eban, residente en la aldea de Kplang, de la comuna de Tan Tien, del distrito de Krong Pak, sigue enfrascado en allanar el suelo de su nueva casa. Esta es erigida gracias a una asistencia de 25 millones de dongs (más de mil dólares) de la Juventud Comunista distrital, más la suma de 40 millones de dongs (más de mil 700 dólares) brindada por varias entidades benefactoras. Con ingresos reducidos obtenidos del trabajo jornalero, Eban, su esposa y sus tres hijos pequeños hasta ahora viven en una pequeña casa, más bien una choza, de apenas 10 metros cuadrados. La nueva vivienda, que será más amplia y cómoda, comenzó a construirse a inicios del mes de marzo, lo que alegra a toda la familia. Y Dut Eban expresó: “Enfrentamos muchas dificultades económicas ya que la vida de jornalero como la mía es muy dura. El dinero que ganamos lo gastamos todo para la comida diaria, por lo que vivimos en condiciones precarias y no tenemos recursos para construir una casa más cómoda. Ahora, con la asistencia brindada por varias entidades, podemos levantar una nueva. Me siento muy feliz. Tratamos de trabajar al máximo para desarrollar la economía familiar y comprar más bienes para nuestra casa”.

En esta misma comuna de Tan Tien otras dos viviendas de solidaridad fueron construidas, una de ellas es del hogar de Mai Thi Phuong. Esta mujer, madre de tres chicos en edad escolar, gana su sustento recolectando chatarra. Tras recibir una asistencia de 25 millones de dongs para construir una nueva casa en sustitución de la casucha en la que hasta entonces vivían, Phuong y su esposo pidieron dinero prestado a sus parientes, con la determinación de levantar una vivienda nueva y más espaciosa. Gracias a la ayuda entusiasta de los vecinos y los miembros de la filial de la Unión de Jóvenes Comunistas Ho Chi Minh del distrito de Krong Pak, finalizaron la construcción de la casa solo después de más de un mes. La mujer dijo: “Puede que para otras personas la suma de dinero que nos dieron sea pequeña, pero para mi familia era toda una fortuna. Nos ayudaron con todo el corazón, por lo que estamos muy agradecidos. Tras finalizar la construcción de nuestra vivienda nueva hemos podido pagar casi todas las deudas y nuestra vida ahora es estable”.

La señora Mai Thi Phuong delante de su casa construida en 2016 con el Fondo de Mil dongs. (Foto: VOV)

Las casas de Y Dut Eban y Mai Phuong son solo dos de las decenas de viviendas edificadas con los recursos del Fondo de Mil dongs, promovido desde 2013 por la agrupación juvenil del distrito de Krong Pak. Con el propósito de desplegar el programa de construir cada año dos viviendas para las dos familias más menesterosas en la localidad, cada joven y militante de la Juventud Comunista del distrito aporta al fondo anualmente mil dongs en adelante. La organización también busca otras fuentes de asistencia de las unidades y personas patrocinadoras, además de apoyar a los hogares necesitados en el diseño y la construcción. Al respecto, Vo Quoc Viet, secretario de la agrupación juvenil de la comuna de Tan Tien, dio a conocer: “Desplegamos la iniciativa de construir casas de solidaridad según la orientación de la organización juvenil del distrito hasta cada filial de base. Realizamos una revisión de la situación de la vivienda de los pobladores en todas las aldeas y los caseríos. Ayudamos a los beneficiarios en el desmantelamiento de la casa vieja y la construcción de la nueva. En este trabajo participa todo el sistema político local a fin de ayudar a la población a estabilizar la vida y fomentar la economía, e igualmente reducir la tasa de familias pobres y en situación especialmente difícil”.

No obstante, este programa reviste un mayor significado, como afirmó Nguyen Van Ha, secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas del distrito de Krong Pak: “El efecto de la iniciativa no se limita en una o varias casas cómodas que se han construido, sino también en el cambio en la conciencia de la gente local sobre la empatía y el significado del hecho de compartir. Educa a los jóvenes y adolescentes de la localidad en el ahorro, la solidaridad y el apoyo mutuo. La realidad ha demostrado que muchas familias beneficiarias del programa, especialmente sus hijos, se han esforzado más en el estudio para lograr mejores resultados académicos. Mientras, la situación económica de sus hogares también ha mejorado bastante después de estabilizarse en las nuevas viviendas”.

Hasta la fecha, 12 familias de Krong Pak se han beneficiado de esta iniciativa, y con su despliegue continuo más casas nuevas y cómodas serán construidas, a fin de transformar la fisionomía de esta localidad y extender más el espíritu de solidaridad entre la población.