(VOVWORLD) - Con Son, un cayo de más de 20 hectáreas con un paisaje virgen en medio del espacio urbano en el distrito de Binh Thuy, en la ciudad meridional de Can Tho, se ha convertido en una nueva atracción de esta localidad. Al acercarse el Tet, o la fiesta del Año Nuevo Lunar, Con Son brinda una variada oferta cultural a los visitantes.
 Los visitantes se trasladan desde el ferry de Co Bac a Con Son. (Foto: VOV) |
En Con Son, los lugareños llevan una vida sencilla y mantienen las costumbres arraigadas de la nación en el festejo del Tet. En el último día del viejo año lunar, las familias elaboran comidas para colocarlas en el altar y rendir tributo a sus antepasados. En la bandeja de ofrendas no puede faltar un cuenco de “thit kho tau” (carne de cerdo cocinada con huevos), ya que es un plato tradicional, vinculado con la infancia de muchas personas.
Los habitantes de Con Son viven de dos oficios principales, el cultivo de arroz y frutas, y la pesca. Desde hace años, aprovechan la fuente de peces en el río Mekong para desarrollar la piscicultura y convertir sus piscifactorías en lugares de visita. En las vacaciones del Tet, estos locales reciben a más turistas, quienes disfrutan de recorridos por el lugar. Según Ly Van Bon, propietario de la piscifactoría de Bay Bon, si el número promedio de visitantes a la aldea de pesca en el río es de 100 personas por día, en ocasión del Año Nuevo Lunar la afluencia turística aumenta significativamente. Siempre nos esforzamos por crear nuevos productos y servicios turísticos para satisfacer a los turistas, dijo.
“Estimulamos la creación de nuevos productos turísticos entre los locales a fin de atraer a más visitantes. Les damos lo mejor que podemos para que se sientan cómodos y bienvenidos, para que perciban la hospitalidad de la gente, su estilo de vida y sus costumbres”, continuó.
 Los turistas dan a comer a los peces en la piscifactoría de Bay Bon. (Foto: VOV) |
Aparte de eso, los turistas también tienen la oportunidad de participar en los diversos pasos de la elaboración de los pasteles tradicionales de la tierra de Cochinchina, que son muy variados, desde “banh khot”, “banh beo” y “banh chuoi” hasta “banh tam” y “banh in”. Especialmente en los días previos al Tet, pueden vivir el ambiente de preparación de los lugareños para la mayor fiesta del pueblo a través de la elaboración de “banh tet”, pastel tradicional semejante al “banh chung” cuadrado de la gente del norte hecho a base de arroz glutinoso, soja verde y carne de cerdo envuelto en hojas de la planta “dong” (Phrinium), pero en forma cilíndrica.
Le Thi Be Bay, una guía y experta en pasteles tradicionales de Con Son, dijo que en este lugar, el “banh tet” es considerado el representante de los sabores tradicionales del Tet.
“Durante el Tet, quiero mostrar a los visitantes cómo envolver los pasteles para que entiendan mejor sobre las especialidades de nuestra tierra natal. También les hablo sobre el significado del Tet y el lugar que ocupa el pastel ‘banh tet’ en este festejo. La tradición de velar durante horas por la gran olla de ‘banh tet’ colocada sobre el fogón nos propicia la oportunidad de dejar a un lado los teléfonos inteligentes para acercarnos más. Eso tiene un alto valor espiritual”, expresó.
 El espacio de elaboración de pasteles tradicionales al servicio de los turistas en la casa de la artesana Le Thi Be Bay. (Foto: VOV) |
En Con Son, los turistas también pueden ponerse en la piel de los agricultores locales con la captura de peces, camarones y caracoles, y los frutos obtenidos se convertirán en platos deliciosos para su disfrute. Las comidas se consumen en un ambiente alegre, y con una carta variada, servida por el dueño de la casa y sus vecinos generosos y simpáticos, quienes aportan al “festín” sus propios platos como el “pollo desmenuzado mezclado con pomelo” de la casa de Phuong My, el “pescado envuelto en la hoja de loto a la parrilla” del estanque de Song Khanh, el “caracol a la parrilla con pimienta” del hogar de Chin Nho y los pasteles tradicionales de la cocina de las señoras de Nam Minh y Bay Muon, entre otros.
Además, resulta interesante para los visitantes contemplar o experimentar otras actividades como elaborar hamacas y palillos, dar a comer a los peces con grandes cucharas y recolectar frutas y degustarlas en el mismo huerto.
Tran Thanh Xuyen, proveniente de la provincia sureña de Ca Mau, se deleita con estas experiencias novedosas.
“En estas vacaciones del Tet, si los turistas vienen aquí a visitar y experimentar lo que hemos hecho hoy tendrán la oportunidad de presenciar los quehaceres diarios de los lugareños y verlos prepararse para el Año Nuevo Lunar con comidas deliciosas como ‘banh tet’ y una multitud de mermeladas como las de coco, jengibre y plátano. Estas actividades son realmente lo que atrae a los visitantes a esta tierra”, dijo.
Con este modelo de turismo comunitario, Con Son ha ido destacando como un nuevo polo de visita en Can Tho. Su atractivo viene además de la sencillez y la simpatía de los locales, quienes se relacionan con los visitantes como si fueran sus familiares. Muestran el seguimiento al pie de la letra de su eslogan de bienvenida “Venir a Con Son es regresar a casa y a un pasado lleno de cosas sencillas y amor”.