En la historia, las sesiones de trabajo del G20 solían concentrarse en la coordinación de las políticas monetarias y financieras entre las naciones desarrolladas y los países en vías de desarrollo para superar la crisis económica en el mundo, que comenzó en 2008. Sin embargo, el lento ritmo de recuperación de la economía global plantea una preocupación y por eso, los dirigentes participantes en el foro de este año están conscientes de que se necesitan ampliar sus actividades a más ámbitos.

Al lado de los 20 Estados miembros incluyendo a China como anfitrión, la cita de 2016 contará con Egipto y Kazajstán como invitados de honor; la República de Chad, presidente rotativo de la Unión Africana; Senegal, socio importante de Beijing en los proyectos de desarrollo en el Continente Negro y Laos, presidente de turno de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático.

Economía, tema principal de la Cumbre del G20 2016

El G20 tiene un papel importante para la economía del orbe. Sus países miembros aportan hasta el 80% del volumen total del comercio exterior y el 85% del Producto Interno Bruto mundial.

La portada de la página web oficial de la Cumbre del G20 2016

Este año, su Cumbre en China tendrá por lema “hacia una economía mundial innovadora, vigorosa, interconectada e inclusiva”. Según la nación organizadora, esto demuestra la determinación de conseguir un proyecto de reforma a fin de fortalecer el crecimiento. Concretamente, intentará comenzar una nueva revolución tecnológica, establecer una economía digital y estimular diálogos entre las naciones desarrolladas y las emergentes.

En esta ocasión, Beijing espera que se analicen los más grandes y candentes problemas económicos. También desea que el G20 se decida a transformar su mecanismo de afrontamiento en cuanto a gestión, conducción y orientación con visión a largo plazo. Por esta razón, las soluciones para promover modelos de crecimiento más creativos, una administración de las finanzas más eficiente, comercio e inversión internacional más dinámicos y formas interactivas más desarrolladas, formarán la parte mayoritaria del contenido de la Cita Magna de 2016.

Al margen de ella, Wang Yi, ministro de Asuntos Exteriores de China dijo que su país también efectuará la Cumbre de BRICS (bloque emergente formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), así como otras conversaciones relativas a la incertidumbre del precio del petróleo, con el fin de reforzar la cooperación internacional.

De acuerdo con el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, la venidera Cumbre del G20 tiene un significado clave para el desarrollo sostenible de la economía del mundo. Mientras, la Casa Blanca anunció que en la reunión el presidente estadounidense Barack Obama hará énfasis en el impulso de un crecimiento económico fuerte, sostenible y equilibrado, en la necesidad de promover el G20 como el foro principal que brinda diversas, amplias y equitativas oportunidades económicas.

¿Se debatirán las disputas de soberanía?

La economía no es el único tema que se abordará en la Cumbre del G20 en Hangzhou. En vísperas de la cita, políticos de varios Estados participantes expresaron su interés en las discrepancias marítimas actuales.

Una isla artificial construida ilegalmente por China en el Mar Oriental

Por ejemplo, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se reunirá con su homólogo chino, Xi Jinping, para tratar las diferencias profundas relativas al tema del Mar Oriental entre ambos países. Entretanto, el gobernante de Indonesia, Joko Widodo, representando a otros dirigentes del Sudeste Asiático, también podría incluir las tensiones entre Yakarta y Beijing en cuanto a la operación de buques de pesca chinos en el archipiélago indonesio de las Natuna en dichas aguas a mediados de agosto pasado. Joko Widodo se comprometió a proteger “cada metro de su soberanía”.

Por otro lado, las tensiones en el Mar de China Oriental, conocido como Huadong, también atraen la especial atención desde que el 31 de agosto, el Ministerio de Defensa de Japón anunció elevar a 51 mil millones de dólares, un récord de la historia, su presupuesto militar en el año fiscal de 2017, a fin de salvaguardar las islas en disputa en la zona antes mencionada.

Se puede concluir que la Cumbre del G20 2016 será una buena oportunidad para acelerar la recuperación de la economía mundial y se espera que las diferencias soberanas no afecten en gran medida a la búsqueda de soluciones por el crecimiento del globo.