.El oficio de fundición de bronce de la aldea Dai Bai en la provincia
de Bac Ninh tiene cientos de años de historia. Sus objetos de altar
sutiles son famosos en todo el país. Sin embargo, en los últimos años,
debido a los efectos de la  depresión económica mundial, el precio de
las materias primas aumentó mucho y el consume disminuyó, haciendo que
numerosos establecimientos de fundición se encontraran en un
estancamiento. En momentos en que la economía aldeana corre el riesgo
de disminuir, algunos artesanos veteranos y jóvenes se esfuerzan por
fundir retratos, considerándolo como una nueva tendencia para
resucitar el oficio tradicional.

Un taller de bronce en la aldea de Dai Bai (Foto:cuocsongviet)

 Antaño esta aldea se llamaba Van Lang ubicada en la ribera del río
Bái Giang a unos 30 kilómetros al Norte del actual Hanoi. En la
historia, Dai Bai destacaba por su conflación de bronce tradicional y
fabricación de utensilios domésticos. A principios del siglo l5, este
trabajo se desarrolló fuertemente. A través de distintos períodos de
fomento esta villa de oficio se especializó con la  formación de
gremios productivos para cada artículo. Algunas juntas producían  las
ollas, bandejas, teteras y palanganas, y otros se dedicaban a la
fabricación de los objetos de plata, la compra de materias primas y la
venta de productos. En un largo tiempo Dai Bai se hizo famosa por sus
objetos para los altares como estatuas, incensarios, floreros, cuadros
y pareados de bronce. Sus artículos están presentes en las casas
comunales, pagodas y reliquias simbólicas. En los últimos
decenios, Dai Bai continuó desarrollándose y manteniendo su oficio
tradicional con muchas cooperativas y empresas privadas, con el
mejoramiento técnico y la fabricación de laminadoras, prensas y
pulidoras.  Sin embargo, en el período 2008-20l0, esta villa
profesional entró en una grave decadencia debido a los efectos de la
economía mundial. El precio de las materias primas aumentó
vertiginosamente, el mercado de consumo se redujo fuertemente,
numerosos establecimientos de fundición de bronce se estancaron y
muchos artesanos abandonaron el oficio. Ante la crítica situación de
la aldea, algunas familias que tenían sus hijos en las escuelas de
bellas artes buscaron medios para fundir los retratos, ofreciendo una
oportunidad para la recuperación del poblado profesional. Dinh Van
Toi, dueño del establecimiento de conflación de bronce de Hai Dang
dijo:
“Actualmente la tendencia de tallar estatuas de padres, abuelos y
personajes históricos de distintas etapas es preferida por muchas
personas como una demanda de su vida espiritual. Además, se utilizan
las obras de bronce para adornar su casa conforme con la geomancia.”
 Según los propietarios de los establecimientos de herrería de Dai
Bai, los  productos más solicitados por los clientes en los últimos
tiempos son las estatuas de Buda y héroes nacionales. Partiendo de la
tradición de los vietnamitas, muchas personas piensan en fundir
retratos para venerar y recordar a los fallecidos. A través de esto se
educa a sus hijos y nietos sobre la tradición  familiar y del linaje.
Nguyen Van Trung, un cliente  de Dai Bai  expresó:
“El retrato da una visión integral de una persona y es tan
significativo como un adorno de la casa. Por ello, vengo aquí para
solicitar que me hagan las estatuas de mis padres para rendirles
culto.”
  Hoy día, la fundición de una estatua es muy simple. Si es un busto,
el cliente solo debe enviar una foto al fundidor. Si este sólo tiene
70 centímetros de altura el encargo estará terminado 25 o 30 días
después. Generalmente un busto de bronce vale de l2 a l5 millones de
dong, aunque el precio depende del tamaño y el peso de la obra. Las
estatuas de Buda son más caras debido a su delicadeza y sutileza.
 En estos días, numerosas compañias y establecimientos de conflación
en la aldea Dai Bai han recuperado su producción y reciben cada día
más solicitudes de los clientes. Casi todos los hornos de fundición de
bronce de esta villa de oficio se mantienen ardiendo. Las estatuas de
bronce de personalidades culturales, históricas y religiosas hechas
por los artesanos de Dai Bai no sólo  reflejan valores culturales y de
educación sobre la tradición patriótica y el autorespeto nacional de
los vietnamitas, sino que contribuyen a rescatar el oficio de esta
aldea tradicional del país.