(VOVworld) – Bajo fuego por la amplia divulgación sobre el espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de Estados Unidos del que presuntamente fueron objeto gobernantes, la asistente presidencial para el antiterrorismo, Lisa Monaco, intentó este viernes tranquilizar la opinión pública norteamericano en el diario USA Today, afirmando que las actividades de vigilancia son necesarias. Aunque reconoció que las revelaciones sobre espionaje contra países amigos conllevan “grandes riesgos” y entrañan “retos significativos”, de complicar las relaciones y dañar la cooperación, reiteró que Estados Unidos seguirá espiando, puesto que “lo mismo sucede con todos los servicios de inteligencia del mundo”. Sin embargo, informó que el presidente Barack Obama ha pedido revisar la política de espionaje y que se respete a los aliados de Estados Unidos, como primera medida para contener la oleada de enojo y protesta internacional.
El presidente Barack Obama ordena una revisión
del funcionamiento de la vigilancia de la NSA
En un hecho relacionado, mientras que muchos países europeos, en particular Alemania y España, piden respuestas sobre las denuncias de interceptaciones telefónicas y de Internet de sus mandatarios y reclaman que el gobierno del presidente Barack Obama cese esas actividades, Gran Bretaña las defiende. El 25 de octubre, el primer ministro británico, David Cameron, acusó al ex empleado de la NSA, Edward Snowden, y a los diarios que publican sus documentos de “ayudar a los enemigos y hacer más difícil mantener a sus pueblos a salvo”, así como “hace el mundo más peligroso”.