(VOVworld) - La policía turca tuvo que utilizar otra vez este sábado chorros de agua y gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes que trataban de entrar en el parque Gezi, a lo largo de la plaza de Tajsim en la ciudad de Estambul considerada como “corazón” de la ola de manifestaciones contra el gobierno del primer ministro Tayyip Erdogan prolongada en los últimos 2 meses. Esta manifestación organizada por el sindicato de la Unión de Arquitectos contó con la participación de cientos de personas para protestar un proyecto de ley que entrará en vigor a parir de la próxima semana, según la cual esta asociación no tendrá la capacidad de ejercer influencias en los planes de construcción de la ciudad. En la capital de Ankara cientos de personas asistieron a similares marchas en lugares cercanos a la embajada de Estados Unidos.

El mismo día, en Bulgaria, unas 2 mil 500 personas manifestaron en la capital de Sofía contra las políticas del Gobierno. Demandaron también la renuncia del gabinete del premier Plamen Oresharski. La manifestación afectó gravemente el tráfico en la capital búlgara.