(VOVWORLD) - Según las últimas estadísticas, alrededor de 200 mil personas padecen de trastornos del espectro autista en Vietnam. Los niños que fueron diagnosticados y tratados médicamente por deficiencias en la comunicación y la interacción sociales, han aumentado, es decir, uno cada 100. Para ayudarlos a ingresar en la sociedad se necesitan esfuerzos coordinados de la comunidad.
Una actividad de educación física para niños autistas en Vietnam (Foto: laodong.vn) |
Mai Anh, residente en el distrito de Hoang Mai (Hanói) compartió el proceso de atención a su hijo con autismo, Nguyen Trung Hieu. La mujer dio a luz en 1999, un momento en que esa enfermedad era un concepto extraño para muchas personas. Los médicos, inclusive, no la detectaron. Casualmente, la madre conoció la causa de los síndromes anormales de su niño mediante un libro y lo internó en un hospital cuando tenía más de dos años de edad. Ella dijo: “Enfrentar el autismo en ese tiempo era para nosotros un proceso complejo. Estábamos entre las primeras familias en Vietnam que lo conocían. El tratamiento nos exigió elegir entre llevar a nuestro hijo al extranjero o invitar a expertos foráneos a casa.”
Durante los últimos 20 años, Mai Anh y su familia han convivido con la enfermedad, convirtiendo a un niño con restrictivos patrones de comportamiento y actividades en un chico que sabe tocar instrumentos musicales, pintar y cocinar.
El hijo de Mai Anh es uno entre los 200 mil casos del trastorno autista, incluidos niños y adultos. Numerosas localidades vietnamitas establecieron escuelas y centros de atención y consulta para los enfermos. Uno de estos establecimientos es el Centro “Por el futuro de los menores autistas” en Hanói. Nguyen Thi Huong, una profesora del Centro “Por el futuro de los menores autistas”, señaló: “Entre los niños autistas, los gestos son lentos. Tienen limitaciones en las reacciones físicas. Debemos diseñar programas concordantes con cada individuo. Los consideramos como nuestros hijos para que se sientan abiertos y cómodos”.
Los niños con autismo se benefician de las políticas preferenciales a los discapacitados en Vietnam (Foto: laodong.vn) |
La enseñanza a las personas con autismo requieren tiempo y cariño. La psicóloga Nguyen Thi Ngoc Bich, directora del centro, explicó que sus alumnos tienen bajas habilidades lingüísticas, con restricciones y repeticiones en la pronunciación y la comunicación. Superar esos problemas les toma a algunos varios años de práctica.
No hay un manual o medidas específicas para ellos. La mayoría de los docentes ajusten los métodos de enseñanza según el niño. Según Ngoc Bich, hay casos que pueden recuperar sus funciones antes de la edad escolar, pero otros no. Es una gran pérdida de ellos. Bich señaló: “El trastorno del espectro autista es una enfermedad genética. Podemos detectarla desde los primeros meses de vida para reducir sus síndromes y tomar métodos oportunos de tratamiento. Los padres deben ingresar a sus hijos al hospital si descubren deficiencias en su comunicación. Ellos mismos son expertos en sus niños y deben dedicarles mucho tiempo.”
El autismo en Vietnam se clasifica como una discapacidad. Los pacientes serán beneficiados con las políticas preferenciales a favor de los discapacitados para que tengan confianza en su inserción a la sociedad.