Festejo del Tet en aldea
Los habitantes de la aldea Dam, en la comuna de Liem Tuyen, ciudad de Phu Ly, provincia norteña de Ha Nam, están ocupados completando los preparativos para producir deliciosos pasteles de arroz glutinoso (banh chung) y abastecer a clientes dentro y fuera de la provincia.
 La aldea Dam, en la provincia de Ha Nam, se dedica a la elaborar los pasteles de arroz glutinoso (banh chung) y abastecerlos al mercado doméstico. (Foto: nhandan.vn) |
La aldea Dam elabora banh chung durante todo el año según pedidos, pero el momento de mayor actividad siempre son los días cerca del Tet. El sabor de este festejo del Año Nuevo Lunar de Vietnam está presente en el aire, proveniente de las ollas de banh chung que se cocinan al fuego.
Cada casa, cada persona va y viene, para envolver banh chung. Durante estas vacaciones, los aldeanos no pueden crear suficientes productos para el mercado, ya que la demanda de banh chung aumenta significativamente.
El famoso y delicioso banh chung de la aldea Dam lo disfrutamos gracias a los esfuerzos de la gente local para preservar la antigua técnica de envolver pasteles a mano sin utilizar moldes, con arroz glutinoso cuidadosamente seleccionado, judías verdes rollizas, panceta de cerdo de buena calidad y hojas tiernas de phrynium. En particular, los aldeanos guardan un secreto muy especial: utilizar agua de lluvia para hervir los pasteles durante 12 horas a fuego lento.
Al respecto, Pham Van Luan, residente de la aldea, dijo lo siguiente: “En nuestra aldea, cada casa tiene un tanque de agua de lluvia que se usa específicamente para hervir banh chung. Lo hacemos con agua de lluvia para que el pastel sea firme, delicioso, limpio y pueda conservarse por más tiempo”.
 Los banh chung del poblado Dam se preparan a mano. |
La gente de aquí persiste en este oficio tradicional porque lo que se preserva no es sólo un plato, sino el alma nacional cada vez que llega una nueva primavera.
De esta manera, Bui Minh Tuan, residente de la aldea Dam, compartió: “Banh chung es un símbolo de amor y cuidado en cada familia, simbolizando la tierra. Este pastel está compuesto por arroz glutinoso, frijoles y carne, entre otros ingredientes, los cuales representan la abundancia. Ese es el concepto del pueblo vietnamita desde la antigüedad. Por lo tanto, aunque hoy en día la vida se está desarrollando y hay muchos tipos diferentes de alimentos, se preserva la elaboración de banh chung como muestra del deseo de los aldeanos de tener una vida más próspera”.
Tet en zonas inundadas
La unidad y solidaridad siempre ha sido una tradición del pueblo vietnamita, no sólo en cada familia, sino también en la comunidad. Este Tet, los compatriotas en áreas afectadas por desastres naturales, especialmente inundaciones, dan la bienvenida a una nueva primavera cálida, gracias a gestos solidarios de millones de personas. Sobre todo, tienen confianza en sí mismos para construir una nueva vida.
El último día del año viejo, la atmósfera alegre se extiende por toda la zona de reasentamiento de Huoi Ke, perteneciente a la aldea Linh, comuna de Muong Pon, provincia de Dien Bien. La gente se reúne alrededor de sus nuevas casas más sólidas y espaciosas para celebrar el Tet. Sonidos producidos por golpes de harina de arroz para hacer pasteles mezclados con la risa chirriante, los ojos brillantes de alegría de los ancianos y las mejillas sonrojadas de los niños, denotan felicidad y satisfacción.
 Inauguración de la zona de reasentamiento de Huoi Ke. |
La primavera ha llegado a las aldeas de las minorías étnicas reasentadas en estas zonas montañosas. Seis meses después de las devastadoras inundaciones repentinas de julio, muchos poblados de la comuna de Muong Pon han adquirido un nuevo aspecto. Las 35 nuevas viviendas en la zona de reasentamiento no son sólo un sitio para refugiarse de la lluvia y el sol, sino también un lugar donde pueden celebrar juntos un nuevo año pacífico y próspero. Escuchemos compartir a agunos ciudadanos:
“Todos estamos emocionados y agradecidos por la atención del Partido y el Estado al apoyar la construcción de nuevas viviendas. Plantaremos flores frente a nuestras casas para embellecer la aldea”.
“Este año mis hijos y yo vivimos en una casa nueva. El sueño ahora se ha hecho realidad después de muchos años. ¡Muchas gracias al Estado!”.
“Después de las tormentas, la gente recibió gran apoyo material y espiritual. En la nueva primavera estamos muy emocionados. Esta asistencia nos motiva para estabilizar pronto la vida y entrar con confianza en el año nuevo lunar 2025”.
 El ambiente festivo impera en las zonas de reasentamiento. |
Después de las calamidades, los que se quedaron intentan mantenerse fuertes y estabilizar sus vidas. Otra primavera ha llegado a la gente de aquí. Esto no es sólo un signo de renacimiento, sino también una prueba viviente de humanismo y de la fuerza de voluntad para construir juntos un “poblado ejemplar” y “una aldea feliz”.
Tet lejos de casa
Para los vietnamitas que viven en el extranjero, durante el Tet, todos tratan de preservar y promover los hermosos rasgos de la cultura tradicional y la solidaridad en esta fiesta especial de su tierra natal.
 La diáspora vietnamita en Tailandia celebra el Tet. (Foto: nhandan.vn) |
Con más de 50 años viviendo en Marruecos, Tran Thi Hong May siempre aprecia cada celebración del Tet, especialmente las veces que regresó a Vietnam para celebrar esta fiesta. Estos son preciosos recuerdos que ella cuenta a sus hijos y nietos cuando llega el Tet en Marruecos.
Para la señora May, celebrar el Tet en un país lejano y culturalmente diferente la hace echar de menos el país y la mayor festividad tradicional.
“Tras festejar el Año Nuevo, empiezo a contar los días en espera de la llegada del Tet. Saco el álbum para mirar las fotos en Vietnam y para contar a mis nietos sobre el país, aliviando así la morriña y recordando a mis descendientes que no se olviden de sus raíces”, expresó la mujer.
 Luong Xuan Hoa, presidente de la Asociación de Vietnamitas en la provincia de Udon Thani, Tailandia. (Foto: nhandan.vn) |
Por su parte, Nguyen Van Hoa nació y creció en Tailandia durante más de medio siglo. Su familia vive actualmente en la provincia de Pathum Thani. Todos los años, se prepara para celebrar el Tet desde el día de culto a Ong Cong, genio de la tierra, y Ong Tao, dios de la cocina, el 23 del doceavo mes del calendario lunar. El hombre compartio: “Seguiremos realizando esta ceremonia de enviar a las deidades al cielo, para que las generaciones que nos siguen también la conozcan y practiquen. Según las costumbres, preparamos todas las ofrendas, desde comida, regalos, hasta papel votivo”.
 El presidente de la Asociación de Vietnamitas en Tailandia, Nguyen Ngoc Thin. (Foto: nhandan.vn)
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Para muchos expatriados en Tailandia, el Tet no es sólo un momento acogedor en familia, sino también es una oportunidad de reunión comunitaria. Tras viajar unos 900 kilómetros para llegar a Bangkok, Truong Thi Be, vicepresidenta de la Asociación de vietnamitas en la provincia sureña de Phuket, y Luong Xuan Hoa, titular de la Asociación de vietnamitas en la provincia nordeste de Udon Thani, expresaron su gran alegría al reunirse con sus compatriotas para dar la bienvenida al Año Nuevo Lunar en el programa "Primavera de la Patria".
“Los vietnamitas en Phuket nos sentimos honrados de celebrar juntos con otros conciudadanos en Tailandia una Tet unido y alegre”, dijo Thi Be.
“Este año, el programa Primavera de la Patria se celebra en Bangkok con la asistencia de vietnamitas que viven en 26 provincias y ciudades de Tailandia. Quiero agradecer esta ocasión, porque me permite volver a ver a todos mis connacionales para festejar juntos el Tet”, expresó Xuan Hoa.
Según el presidente de la Asociación de Vietnamitas en Tailandia, Nguyen Ngoc Thin, el Tet para cada coterráneo en el extranjero es una oportunidad para una reunión cálida y para recordar su tierra de origen.
“A pesar de la gran distancia, para cada vietnamita, el Tet sigue siendo una ocasión de conexión sagrada para nutrir el patriotismo, y también para recordar que la tierra natal es siempre un apoyo sólido y duradero de todos”, resaltó.
El ambiente cálido, familiar y cercano que brindan los programas de Primavera de la Patria también ayuda a muchas personas residentes en el extranjero a aliviar su nostalgia. Por esa razón, el profesor asociado Chu Hoang Long, de la Universidad Nacional de Australia, siempre participa en este evento anual, con el deseo de contribuir a mantener las buenas tradiciones culturales:
“El Tet es una ocasión para que nos reunamos como una gran familia, la de todos los vietnamitas en Australia. Tenemos muchos miembros, de distintas edades y obligaciones sociales, pero todos tienen una cosa en común: siempre estamos orgullosos de nuestro origen y cultura”, manifestó Long.
 El programa “Primavera de la Patria”, en la Universidad de Australia Occidental. (Foto: Comité Organizador) |
El encuentro en el Tet también es una oportunidad para que los expatriados intercambien sobre cómo contribuir a la Patria, especialmente cuando Vietnam está haciendo cambios importantes, en los que la ciencia y la tecnología se consideran avances estratégicos en el próximo tiempo.
“Siempre trato de intensificar los intercambios y la cooperación con los colegas en el país, además de aportar a la construcción de una fuerte comunidad vietnamita en el extranjero, con la esperanza de dar lo mejor de mí al país natal”, dijo un compatriota.
“Vietnam se ha desarrollado a una velocidad rápida, tanto en infraestructura como en desarrollo socioeconómico. Aún no hemos aportado mucho a nuestra Patria, pero en nuestra mente y corazón, siempre queremos hacer el máximo esfuerzo para llevar nuestro país de origen hacia adelante”, expresó otro.
Se acerca otra primavera, trayendo consigo la fe y la esperanza de un nuevo año de felicidad y prosperidad, y también de un crecimiento más fuerte de la Patria. Dondequiera que esté, cada vietnamita está orgulloso de la cultura tradicional del Tet y siempre está consciente de preservarla y promoverla.