(VOVWORLD) - La nueva primavera de la Serpiente 2025 será la más recordable para las muchas familias en circunstancias difíciles al poseer una nueva casa construida con el financiamiento del Estado a través del movimiento “Unir manos para eliminar viviendas precarias en todo el país 2025”. Se trata de un regalo de gran significado para los desfavorecidos en ocasión del Año Nuevo Lunar (Tet).
Con la llegada del Tet, la familia de Lau Thi Da, del grupo étnico Mong, en la aldea Gia Khau 1, comuna de Sung Phai, de la provincia septentrional de Lai Chau, está llena de risas de parientes que vienen a felicitarle por mudarse a una nueva casa construida gracias a la asistencia financiera del Estado. Cada persona aporta una mano, ayudando a limpiar y ordenar las cosas.
 Nuevas casas construidas en la aldea fronteriza de Pu Hao de la comuna de Muong Lan, provincia septentrional de Son La.
|
Después de muchos años de residencia en un alojamiento temporal, este año, por primera vez, su familia pudo vivir en una casa más espaciosa y sólida. La obra se construyó con un apoyo de 50 millones de dong deducido de la filial del Comité del Frente de la Patria de la provincia junto con un préstamo correspondiente de 30 millones de dong y la ayuda de familiares y vecinos. La alegría de la familia de Da fue doble cuando en el día de la entrega de la vivienda los benefactores donaron mesas, sillas y artículos para el hogar, entre otros.
“Sin el apoyo del Estado y del gobierno comunal, no sé cuándo mi familia tendría una casa sólida donde vivir. Me alegra mucho que hogares con precariedades como el mío reciban atención y apoyo de toda la sociedad. Trataremos de ganar más ingresos y escapar pronto de la pobreza”, dijo Lau Thi Da.
Mientras, en la aldea fronteriza de Pu Hao, comuna de Muong Lan, distrito de Sop Cop, provincia de Son La, la fecha en que se terminaron las nuevas casas allí fue también el día en que llegó el Año Nuevo Lunar.
Habitantes locales no pudieron ocultar su alegría de recibir nuevas casas después de muchos años de residencia en casas de barro con la inseguridad de cada temporada de desastres naturales.
Thao Thi Chia, una étnica de Pu Hao, compartió: “Este año tenemos una nueva morada, y celebraremos el Tet más felizmente que el año pasado. Invitaremos a los padres, familiares y aldeanos a unirnos a la diversión. Prepararemos pasteles de arroz glutinoso, un cerdo, algunos pollos para festejar el Tet con los mismos”.
Con el espíritu “Hogares ayudan a hogares, pueblos ayudan a pueblos, comunas ayudan a comunas”, el programa de erradicación de casas precarias ha recibido un apoyo entusiasta de la comunidad social, las autoridades locales y las fuerzas armadas, beneficiando así a muchas familias de bajos ingresos de la región montañosa del noroeste como Son La, Lao Cai, Lai Chau, Dien Bien y Yen Bai.
Mientras, en el sur, la alegría de vivir en una nueva vivienda en vísperas del Año Nuevo Lunar también se extiende a los habitantes de la región del Delta del Mekong. La familia de Thach Thi Xiem, en la comuna de Ngoc Bien, distrito de Tra Cu, provincia de Tra Vinh, es un hogar con circunstancias difíciles en la localidad. Durante muchos años, su familia tuvo que vivir en una morada vieja y destartalada. Sus ingresos eran inestables, por lo que no podían permitirse repararla.
La señora compartió: “Antes, mi casa tenía una gotera y no sabía cómo arreglarla. Ahora viviendo en otra más espaciosa, estoy muy feliz. Intentaré trabajar para escapar de la pobreza. Este provecho es gracias al apoyo del Estado”.
De hecho, poseer una casa sólida motivará a las personas en situación difícil a mejorar la vida. Kim Quynh Anh, de la etnia jemer que vive en la comuna de Tan My, distrito de Tra On, provincia de Vinh Long, expresó: “Mi familia y mis vecinos se benefician del programa de patrocinio del Estado. De habitar la antigua casa, ahora muchas familias han pasado a tener alojamientos estables, más espaciosos y escaparon de la pobreza. La vivienda construida por el Estado me ha hecho sentir más entusiasmado y motivado a superar la precariedad”.
 El acto de entrega de vivienda a habitantes de la comuna de Phuoc Hung, distrito de Tra Cu, provincia sureña de Tra Vinh. (Foto: tracu.travinh.gov.vn)
|
En los últimos tiempos, la eliminación de viviendas precarias se ha convertido en un movimiento generalizado, uno de los puntos brillantes del trabajo de reducción sostenible de la pobreza en las localidades, contribuyendo así a mejorar la vida de los pobladores en todo el país. Las moradas de nueva construcción son el resultado del esfuerzo conjunto de todos los niveles de gobierno y de toda la sociedad.
“Una de las formas efectivas en que lo implementamos es movilizar diversos recursos de apoyo. Además de la financiación del Estado y el aporte de la comunidad, hemos movilizado a las fuerzas de seguridad pública, ejército y organizaciones sociales en términos de días laborales. Al mismo tiempo, promovemos el papel de personas prestigiosas entre las minorías étnicas para propagar y llamar a la participación de organizaciones, individuos y filántropos en esta labor”.
“En zonas remotas el coste del transporte de materiales resulta muy elevado. Así que cada fin de semana movilizamos filiales de organizaciones de masas para ayudar a la construcción de casas para los compatriotas con escasos recursos económicos”.
Hasta finales de año, en todas las provincias y ciudades se seguirán construyendo nuevas viviendas para sustituir a las temporales y deterioradas, ayudando así a los habitantes locales a estabilizar su vida. Cada ladrillo y cada techo nuevo es el sentimiento y la solidaridad del Partido Comunista, del Estado, del Gobierno y de toda la sociedad. En particular, las nuevas moradas son una fuente de fortaleza para las familias que aún atraviesan dificultades a medida que se acerca el Año Nuevo Lunar.