(VOVWORLD) - La sexta edición de los Premios Internacionales de Gastronomía (World Culinary Award) anunció recientemente los mejores destinos culinarios del 2025 y Vietnam fue denominado como el referente gastronómico de Asia. Este galardón reafirma el encanto irresistible de la cocina vietnamita, que no solo destaca por su diversidad, sino también por reflejar de manera auténtica la identidad cultural local en cada plato.
 Vietnam es uno de los principales destinos culinarios de Asia. (Foto: VOV)
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Desde los platos más sencillos hasta las propuestas más elaboradas, la cocina vietnamita ofrece un retrato vivo de su cultura, su historia y su gente. Cada receta cuenta una historia: la de su territorio, sus costumbres y la armoniosa relación entre los locales con su entorno natural.
El uso de ingredientes frescos y la combinación equilibrada de sabores en la gastronomía vietnamita han logrado conquistar los gustos más exigentes, desde expertos y chefs hasta viajeros internacionales.
 Bun bo Hue, uno de los platos típicos de la ciudad central de Hue. (Foto: VOV)
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La armoniosa mezcla de dulzor, agrio, salado y picante, junto con el uso de las hierbas naturales, no sólo define su sabor característico, sino que también refleja la sensibilidad y creatividad del paladar vietnamita.
Al respecto, la especialista culinaria Duong Hai Anh expresó: “El reconocimiento internacional ha reforzado aún más el orgullo culinario de los vietnamitas. En todas las regiones del país cada plato encierra una historia y una carga cultural que refleja los valores y particularidades de Vietnam. Cuando los viajeros vienen aquí no simplemente comen o prueban nuestros platos: están apreciando una expresión completa de la cultura vietnamita, incluida la manera en que vivimos”.
 Banh mi, una de las famosas comidas callejeras de Vietnam. (Foto: VOV)
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En Vietnam el cultivo del arroz ha estado íntimamente vinculado a la vida cotidiana y al acervo cultural del pueblo.
Siendo uno de los principales exportadores mundiales, este país ha sido galardonado en tres ocasiones por la excelencia de su arroz. No es casualidad que este grano se haya convertido en el símbolo de la cocina nacional: adopta múltiples formas, acompaña la mayoría de las preparaciones tradicionales y encarna la esencia misma de la mesa vietnamita.
Al saborear la primera cucharada del tradicional cuenco de fideos de arroz en sopa, la turista Kasia Klimczewska quedó sorprendida por la intensidad y la armonía de sus sabores: “En este pequeño cuenco de fideos hay de todo un poco, y cada sabor se nota. Lo primero es el aroma fuerte del limoncillo, pero cuando le pongo un poco de ají, se vuelve bastante picante y más intenso. Lo que más me gusta son los fideos de arroz blancos finitos: equilibran ese picor y hacen que todo quede muy rico”.
 El pho de Hanói es un plato mundialmente conocido. (Foto: VOV) |
La gastronomía vietnamita destaca por su diversidad regional y por conservar, en cada plato, la esencia cultural del país. Hanói, recientemente nombrada “Destino culinario urbano emergente líder de Asia”, ofrece sabores variados que cuentan historias sobre la vida y el espíritu de la capital. El café con huevo, por ejemplo, es una de sus bebidas más singulares y reconocidas en el mundo.
En el centro del país, Hue es considerada la “cuna culinaria” de Vietnam con platos como el bun bo Hue (fideos de arroz con carne de res en caldo al estilo imperial), el com hen (Arroz con corbicúlidos) y una amplia gama de pasteles tradicionales. Mientras tanto, Ciudad Ho Chi Minh conquista a los viajeros con sus emblemáticos sándwiches, banh mi, por combinaciones perfectas de carne, hierbas y salsas locales.
Para el experto Nguyen Thuong Quan esta riqueza culinaria nace de “las distintas formas que tiene la cocina vietnamita”.
“La gastronomía vietnamita se nutre de la vida cotidiana: ofrece variedad, se adapta a las estaciones y a los ingredientes propios de cada región. Esa es la verdadera vitalidad de una tradición construida en torno al arroz”, dijo.
La comida callejera de Vietnam es otro manjar irresistible que refleja la sencillez y el espíritu cercano de su gente. Los vendedores ambulantes, verdaderas huellas vivas de la perseverancia y la laboriosidad en la cultura local, han dedicado décadas a perfeccionar una única receta transmitida de generación en generación, dando como resultado platos con sabores, texturas y colores inconfundibles.
La especialista Duong Hai Anh explicó: “Casi todos esos vendedores callejeros llevan muchísimos años preparando y ofreciendo el mismo plato, una verdadera herencia familiar. Se dedican únicamente a esa receta y en ella ponen cuidado, concentración y la destreza acumulada de toda una vida e incluso de varias generaciones. Han probado, ajustado y perfeccionado cada detalle, y saben exactamente cómo preparar el plato para que alcance su mejor sabor, su color ideal y la textura perfecta antes de servirlo”.
En Vietnam la cocina es un cruce armonioso de aromas, colores y sensibilidad. Por ello, la gastronomía se convierte también en un puente cultural, capaz de proyectar al mundo la creatividad, la identidad y la calidez de este país del Sudeste Asiático.