La gobernanza contemporánea exige un Estado de derecho íntegro, con capacidad real de servir al ciudadano al considerar la ley como instrumento, los datos como base, las personas en el centro y el desarrollo como meta.

El XIII Comité Central del Partido Comunista presentado ante el Congreso. (Foto: VNA)

Una administración más accesible y eficiente

Hoang Thi Tieng acudió al Centro de Servicios Administrativos de la comuna de Trung Khanh de la provincia norteña de Cao Bang para tramitar una transferencia de uso de la tierra. Recibió asistencia desde la obtención del turno hasta la tramitación en línea, lo que le permitió completar el expediente con rapidez.

“El personal atiende con dedicación y ahora los trámites se resuelven de forma más ágil. Las explicaciones son claras, así que todo se hace muy rápido”, dijo Tieng. 

Es uno de los muchos casos que se benefician del nuevo modelo de administración local de dos niveles. Tras más de cinco meses de aplicación, el aparato administrativo está pasando de una lógica pasiva y centrada en el control a una actuación proactiva, destinada al servicio y al fomento del desarrollo. Así lo resumió Do Xuan Hieu, vicepresidente del Comité Popular de la comuna de Hoa Phu (Dak Lak), al decir: “El Gobierno debe ser un Gobierno al servicio, es decir, en vez de esperar a que la gente acuda, debe acercarse a la ciudadanía y a las empresas. Hay que anticiparse a sus necesidades para diseñar políticas, planes y proyectos que respondan a ellas”.

Un enfoque de gobernanza basado en datos

Si en el modelo tradicional la gobernanza se vinculaba a órdenes administrativas y experiencia, hoy se mide también por la capacidad de decidir a partir de datos, evidencias y retroalimentación social.

En este sentido, Nguyen Quang Dong, director del Instituto de Investigación de Políticas y Desarrollo de la Comunicación, afirmó: “La filosofía de gobernanza en Vietnam siempre ha buscado servir al pueblo. Pero la tecnología digital ha transformado la manera de funcionar, gobernar y prestar servicios. Antes la mentalidad ‘pedir–dar’ era común; ahora, con los trámites en línea, sin barreras territoriales, la distancia entre la ciudadanía y el Estado se ha reducido. Y en la dirección del país, formular y ejecutar estrategias basadas en datos permite decisiones más rápidas”.

Varias provincias encabezan este cambio. La provincia norteña de Quang Ninh opera su Centro de Operaciones Inteligentes (IOC), que proporciona información en tiempo real y facilita decisiones más transparentes. Por su parte, la ciudad central de Da Nang ha desarrollado un modelo de gobernanza digital bidireccional que abre un canal directo de retroalimentación entre el Gobierno y la ciudadanía.

Este cambio conceptual también implica pasar del control a la coordinación y la creación de condiciones para el desarrollo. Así lo expone el doctor Nguyen Van Dang, del Instituto de Liderazgo y Administración Pública de la Academia Nacional de Política Ho Chi Minh.

“Una gobernanza moderna, eficaz y al servicio del ciudadano se basa en la participación de múltiples actores. El Estado y el sistema político desempeñan un papel central, pero es necesario incorporar gradualmente a otros, como el sector empresarial. La Resolución 41 del Comité Central sobre empresas y empresarios en la nueva etapa reconoce la importancia de este sector en la materialización de los objetivos de desarrollo nacional”, manifestó.

Al intervenir en el décimo período de sesiones de la Asamblea Nacional, XV Legislatura, el secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam, destacó algunas orientaciones principales del borrador de Documentos que se presentarán al XIV Congreso, diciendo lo siguiente: “Debemos definir con mayor claridad el modelo de gobernanza nacional para la próxima etapa: gobernanza basada en leyes transparentes, datos fiables, infraestructura digital moderna, un aparato institucional simplificado y funcionarios íntegros; una gobernanza disciplinada y orientada al servicio. Eso es gobernanza para el desarrollo, no una gobernanza ‘pedir–dar’”.